La comisión de investigación del 11-M decidió dar de margen al PP hasta el lunes día 7 de marzo a las 13.00 horas para que haga aportaciones de mejora o presente alternativas al documento de recomendaciones consensuado por el resto de los grupos y que será votado al día siguiente.
Según explicó el presidente de la comisión, Paulino Rivero, "el
espíritu de la comisión sigue siendo que este pronunciamiento pueda
tener el mayor consenso posible, a ser posible conformidad de todos" de cara al primer aniversario de los atentados del 11 de marzo.
Por ello, se ha decidido dejar abierta la puerta al PP, y al resto de los grupos, para que presenten alegaciones al texto,
que se votará en una reunión convocada para el martes día 8 a las 9.00
horas. Si no hay consenso la decisión podrá adoptarse por mayoría,
según explicó Rivero.
El documento de recomendaciones
preliminares consensuadas por el PSOE y las minorías se debatirán el
próximo martes junto con las propuestas de modificación que se
presenten. El texto resultante se someterá a votación ese mismo día, con lo que se da por seguro que se aprobará, con o sin el PP.
Paulino
Rivero se mostró convencido de que los proponentes están dispuestos a
flexibilizar su posición para atraer al PP, si bien admitió su decepción por las pocas perspectivas de consenso unánime, ya que no le consta voluntad de acuerdo por parte del Grupo Popular.
Rivero explicó asimismo que en la reunión quedó claro que los servicios jurídicos del Congreso
habían despejado las dudas planteadas por el PP al dar vía libre a que
la comisión emitiera un documento de recomendaciones en materia de
seguridad y de atención a las víctimas separado de las conclusiones
finales.
El portavoz del PP en la comisión, Vicente Martínez Pujalte,
ha explicado que la oposición de su grupo no es al contenido del texto,
sino al trámite. Así, su propuesta es que para el aniversario del 11-M
el Congreso apruebe en sesión plenaria una declaración institucional
conjunta de apoyo a las víctimas.
Martínez Pujalte ha reconocido
que "algunas de las recomendaciones" propuestas por el resto de grupos
"están bien" y que "por supuesto" el PP las comparte, pero ha señalado
que su partido es partidario de que tengan "validez jurídica" y de que "sean efectivas". Según declaró, este documento es sólo "una declaración política" que anticipa "la posición de los grupos ante las conclusiones" definitivas.
El
representante del PP insistió durante su intervención ante los medios
posterior a la reunión en que la única motivación que mueve a su grupo
en la comisión del 11-M es la protección de las víctimas. "Nadie va a ganar al PP en preocupación por las víctimas", aseveró Martínez Pujalte.
Del martes al miércoles, el documento ha pasado de 44 a 33 páginas hasta convertirse en un listado con un total de 140 propuestas concretas
de mejora de la seguridad y la atención a las víctimas. Los principales
ajustes desde los primeros borradores se han referido sobre todo a
evitar referencias a la gestión del anterior Gobierno, para así
facilitar al PP que lo suscribiera.
Última oportunidad
El
diputado 'popular' no concretó durante su rueda de prensa si su grupo
presentará enmiendas al documento ya registrado u otro alternativo en
la reunión convocada el martes, día 8.
Mientras, todos los
grupos parlamentarios pidieron al PP que se sume a "la última"
oportunidad que tiene de unirse a las recomendaciones. Los
representantes del PSOE, CiU, ERC , PNV, IU y Grupo Mixto en la
comisión insistieron en que ese documento no es el que cada uno de
ellos hubiera deseado, pero que todos han cedido algo.
"No podemos hacer más esfuerzos por lograr un consenso", advirtió el socialista Álvaro Cuesta,
después de reiterar que todos los borradores han sido entregados al PP
y siempre se ha invitado a este partido a hacer sugerencias y
aportaciones.
Especialmente enfático se expresó el representante de CiU, Jordi Jané,
al advertir al PP de que los ciudadanos pedirán a los partidos "algo
más" que una mera declaración institucional cuando se cumpla un año
desde los atentados, y ese "algo más" son medidas concretas para evitar
el riesgo de nuevas masacres.
El portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya, Joan Puig aseguró que ha sido el PP el que "ha querido quedarse al margen", y el del PNV, Emilio Olabarría,
aseguró que la discrepancia no es entre dos bloques iguales, sino entre
seis bloques por un lado, y uno por otro, que se ha quedado solo.
El diputado de Chunta Aragonesista, José Antonio Labordeta,
denunció en nombre del Grupo Mixto el intento permanente del PP de
"desprestigiar" la comisión de investigación, y el coordinador general
de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, insistió en que este documento tendrá valor político, le guste o no al PP.