INFORME REMITIDO AL JUEZ JUAN DEL OLMO
Guardias civiles de Oviedo acusan al coronel Hernando de mentir en la Comisión de Investigación del 11-M

EL MUNDO

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MADRID.- La Guardia Civil de Oviedo envió un informe al juez Juan del Olmo, que consta en el sumario del 11-M, en el que se acusa de decir "falsedades" al coronel jefe de la Unidad Central Operativa (UCO) del Instituto Armado, Félix Hernando. En el escrito sobre la 'Actuación de la Comandancia', se asegura que este mando engañó de manera "flagrante" a la Comisión parlamentaria.

Según publica hoy El MUNDO, en un breve documento de 12 folios se le acusa de haber "infravalorado" las confidencias de su informador Rafa Zohuier sobre la trama de venta de explosivos y de "no haber dedicado recursos a una investigación que entraba de lleno en sus competencias".

Hernando declaró que la investigación sobre la trama era de la zona de Asturias y no de la UCO. Durante su intervención, defendió a capa y espada que su Unidad remitió sus investigaciones a Asturias al entender que era un tema local. En toda su comparecencia, intentó demostrar que esa investigación no era competencia de la UCO. Sin embargo, los autores del escrito dejan claro que ese ámbito competencial no era de Asturias, sino de la Unidad dirigida por Hernando. Los datos sobre el entramado de venta de explosivos habían sido proporcionados a la UCO por su confidente Rafá Zouhier.

En su comparecencia ante la Comisión del 11-M, el recién nombrado director general de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, asumió por completo las tesis expuestas por el coronel de la UCO. La Guardia Civil, según explicó, desplegó un "vasto y extenso operativo policial" durante varios meses de 2003, sin que se pudiera obtener "ningún dato o hecho objetivo".

Según el informe de los guardias civiles de Oviedo, "la UCO, viéndose comprometida por su actuación en la investigación de la trama de explosivos, decidió aferrarse a la nota interior para presentarla como un documento de cierre y traspaso de su investigación para poder desentenderse de consecuencias posteriores".

El informe, que llegó al juzgado de Del Olmo sin firma y sin fecha, también concluye que la Policía Nacional "investigó la red de Toro y de Trashorras sin resultado y, al parecer, cometieron una grave irregularidad que permitió que 200 kilos de explosivos no fueran incautados. Nunca informaron a la Guardia Civil del resultado de esta operación". Se refieren a la captura de ambos en una operación denominada Pipol en la que se les intervinieron a ambos drogas, armas y explosivos.

Denuncian también que la Guardia Civil de Gijón investigó esa trama "sin resultado". Esta comandancia "menospreció la información obtenida por la Guardia Civil de Oviedo y se negó a integrarse en un grupo de trabajo mixto".