Las protestas se desarrollaron en silencio y sin pancartas frente a los ayuntamientos de las tres ciudades y contaron con la presencia de numerosos dirigentes del PP, que lamentaron la ausencia del resto de formaciones en las concentraciones.

La dirigente popular María San Gil aprovechó su asistencia a la concentración de San Sebastián para recordar al Gobierno que no basta con suspender el diálogo con ETA, sino que tiene que volver a las «políticas antiterroristas».

En Bilbao, alrededor de un centenar de personas se reunió en torno al Ayuntamiento, junto a los concejales del PP, encabezados por su portavoz y presidente del partido en Vizcaya, Antonio Basagoiti. En Vitoria, otras tantas personas secundaron la convocatoria, encabezadas por el diputado general de Alava, Ramón Rabanera, y por el alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, ambos del PP.