Sin embargo, en el sector, aunque se había previsto una caída algo mayor, este resultado es motivo de una cierta preocupación. La razón es que, con un crecimiento del PIB en el cuarto trimestre tres décimas superior al que se registró en el mismo periodo del año pasado, se esperaba una corrección al alza de su previsión, pero ésta ha sido mínima.

Es más, según Faconauto -la federación de los concesionarios de las marcas que operan en España-, el resultado de diciembre debería indicar una caída del 8,8% y no del 5,3% como finalmente se ha comunicado, porque durante este mes se produjo un importante número de automatriculaciones, realizadas por las marcas para mantener sus cuotas de mercado.

Perturbar el mercado

En este terreno se han distinguido Ford y Peugeot, que han matriculado 741 y 714 coches respectivamente. Toyota, con 281, encabeza un grupo de marcas que ha matriculado cantidades menores de vehículos. Los concesionarios y la asociación de importadores, Aniacam, hace tiempo que vienen señalando que esta práctica perturba el mercado, puesto que estos coches acaban poniéndose a la venta bajo la modalidad kilómetro 0, es decir, automóviles ya matriculados pero sin haber sido utilizados. Hay que esperar, por tanto, que las cifras del mes de enero se vean penalizadas por estos coches.

En este escenario, la previsión para el año que viene es de una caída algo mayor, entre el 1% y el 2%. Esto se debe, entre otras razones, a la pérdida de eficacia del Plan Prever, debido a las modificaciones que se han introducido en él. Tal es el caso de la reducción de la subvención fiscal o que algunos modelos, por ser considerados muy contaminantes, queden excluidos de estas ayudas, incluso cuando van a sustituir a coches de 10 o más años de antigüedad.

El año pasado mantuvo o incluso dio lugar a que se potenciaran algunas tendencias que habían empezado a manifestarse en la evolución del mercado a lo largo del último quinquenio. Así, se ha incrementado la presencia de vehículos con motor diésel, que ya superan el 70% de las matriculaciones totales. Y también siguieron creciendo las ventas a empresas, que engloban las que se producen por medio de la fórmula del renting, una modalidad de utilización de vehículo que sigue ganando adeptos. Representa ya algo más del 25% de las matriculaciones y su incremento se produce principalmente en detrimento de las ventas a particulares, que son las que más interesan a las marcas y a sus concesionarios, por ser las más rentables.

En este terreno de la rentabilidad de los concesionarios, 2006 ha sido un año estable. Aunque la media de las promociones ha sido de 1.499 euros por vehículo, el total de lo que han gastado por las marcas y sus redes comerciales en este capítulo ha sido un 3,3% inferior al del año pasado.

Sin embargo, el margen de contribución de la venta de automóviles nuevos sigue siendo muy baja, en torno al 1%. Esto obliga a los concesionarios a buscar su beneficio en otras línea de negocio entre las que figuran, además de los servicios de taller y de venta de coches de ocasión, la financiación y la venta de seguros. La facturación total de los concesionarios se elevó en 2006 a 29.500 millones de euros, un 0,2% más que en el año precedente.

En cuanto a la demanda, también ha sufrido una transformación. Los coches de tamaño medio como el Renault Mégane o el Ford Focus, siguen siendo los más vendidos, pero su demanda está bajando. En cambio, crece la de los coches de lujo, de los monovolúmenes, de los todoterreno y de los microcoches. Estas cuatro categorías de vehículos, que hasta hace poco eran algo marginales y elitistas, supone ya en conjunto un 25% del mercado. Los coches de tipo medio han perdido un 12,7% de participación en el total de las ventas.

En cuanto a las marcas, relevo histórico. Renault, líder tradicional del mercado salvo el año 1995 en que fue superada por Ford, ha cedido este año el puesto a Citroën. De todas formas, entre las marcas de mayor difusión, la que ha logrado el mayor crecimiento ha sido Toyota, por delante de Honda y de Fiat. Entre las minoritarias, hay que señalar los progresos de Lexus, coches de lujo, y de Dacia, coche de bajo coste.