El alcalde de Barcelona fue tajante y sin paliativos al negar rotundamente que en un futuro próximo la capital catalana cobre un peaje a los vehículos rodados que circulen por Barcelona, tanto si hacen desplazamientos internos, como si entran o salen de la zona urbana, Una posición tranquilizadora, que contrasta con la dubitativa de su predecesor y que sorprende en el impulsor de la zona verde.

JOSEP MARIA ALVAREZ (BAJA)

La propuesta del secretario general de la UGT de Catalunya de elevar el salario mínimo interprofesional de los 570 euros de 2007 a 1.000, por paulatino que sea el incremento, es, cuando menos, irresponsable. No sólo porque atenta contra los principios del libre mercado, sino porque las autoridades económicas que se han pronunciado al respecto han dejado claro que sería una medida inflacionista.