Las demandantes exigían una cuantía de unos 60.000 euros para cada una de ellas y que se declarase que el medicamento fue el causante de sus daños, según informó a Efe el abogado de las mujeres, Fernando Osuna, quien matizó que tres de las 15 mujeres que no van a recibir indemnización ya han anunciado su intención de recurrir la sentencia.

En su opinión, la disparidad entre lo solicitado por la acusación y la sentencia se debe a que el juez no valoró el daño moral y aplicó un criterio «poco ajustado a derecho».

El auto fue dictado por el Juzgado de Primera Instancia número 12 de Barcelona y en él se declara que el Agreal, cuya comercialización fue suspendida en 2005 por la Agencia del Medicamento, es un producto «defectuoso» y «deficiente» que produce efectos «extrapiramidales, acción y dependencia», según Osuna. A pesar de que la sentencia no establece indemnización alguna a 15 de las 18 demandantes, el abogado aseguró que en los procesos judiciales venideros «la situación cambiará» ya que dijo que estas primeras demandantes «no pudieron llevar al juicio a especialistas en neurología o medicina interna como peritos debido a la escasez de medios económicos».