No parece que la llegada del socialista José Montilla a la presidencia de la Generalitat haya servido para cambiar el rumbo de la política lingüística del Govern. Aunque el nuevo president prometió tras su elección centrarse en los temas sociales y apartar los identitarios, en el último semestre de 2006 el Departament de la Presidència concedió subvenciones a entidades que difunden la lengua catalana por valor de 2.195.950 euros.
Las entidades e iniciativas beneficiadas con las ayudas de la Generalitat fueron las «dedicadas a difundir y prestigiar la cultura, la lengua y la identidad catalanas dentro de su ámbito lingüístico», que incluye la Comunidad Valenciana, Baleares, la Cataluña Norte o francesa y el municipio italiano de L'Alguer.
Pese a que José Montilla no tenía aún responsabilidades en la Generalitat, se trata de la primera partida importante de subvenciones que se ha conocido durante su mandato. Corresponden al tercer trimestre de 2006, justo cuando ERC fue expulsada del Govern por Pasqual Maragall, y se concedieron mientras el PSC era casi hegemónico en el Ejecutivo, pero la variación es mínima. De hecho, más de tres cuartas partes de ese dinero fueron a parar a asociaciones radicadas fuera de la Comunidad Autónoma catalana.
El Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) recoge en su edición de ayer, como es preceptivo, las ayudas que superan los 3.000 euros. Las más importantes son las concedidas a la agrupación Obra Cultural Balear (200.000 euros para «difundir y promover la lengua y la cultura»), a Escola Valenciana / Federació d'Associacions per la Llengua (145.000 euros con el mismo objeto), a la Fundació Cultura (135.000 euros para el concierto de Sant Jordi), a Acció Cultural del País Valencià (100.000 euros para la creación de un «proyecto de garantías lingüísticas») y a la Associació Conèixer Catalunya, que fue subvencionada también con 100.000 euros.
Guerra de Sucesión
Existen algunas ayudas menos cuantiosas pero más pintorescas, como la concedida a la entidad Petanca Pradenca para la organización del Trofeu de petanca dels Països Catalans o una segunda subvención a Acció Cultural del País Valencià para llevar a cabo un «homenaje a los muertos y a las ciudades represaliadas por la Guerra de Sucesión», la contienda bélica cuyo fin supuso la derogación de los fueros catalanes en 1714.
También destaca el apoyo que la Generalitat ofrece a entidades radicadas en L'Alguer, una pequeña ciudad de apenas 40.000 habitantes de la isla de Cerdeña que, por su pasado dentro del Reino de Aragón y la repoblación catalana, conserva aún ese idioma. El Cercle per a la Defensa i la Difusió de la Llengua i la Cultura Catalanes fue premiado con 45.000 euros, y el Centre de Recursos Pedagògics Maria Montessori recibió en el último trimestre de 2006 20.000 euros para su «escuela maternal en catalán».
La Comunidad Autónoma de Aragón, una parte de la cual, conocida como La Franja, es también catalanohablante, también fue beneficiada con las subvenciones de la Generalitat. La Institució Cultural de La Franja recibió 25.000 euros para promover la lengua y la cultura catalanas, y la Asociación Cultural del Matarranya se hizo con 6.000 euros para editar dos CD de música tradicional de ese territorio en catalán.
El dinero público catalán sirvió, además, para que los Joves de Mallorca per la Llengua celebraran la tradicional Acampallengua, un encuentro con acampada y conciertos para concienciar a la población de la importancia del uso del idioma catalán. En concreto, la asociación recibió 15.000 euros por ese concepto.
Como la Generalitat sólo está obligada a dar publicidad a las subvenciones superiores a los 3.000 euros, no se conoce el montante total de las ayudas, pero es más que probable que superen los dos millones y medio de euros.
