El consejero vasco de Justicia y Trabajo, Joseba Azkarraga (EA), manifestó que el lema es «apropiado y correcto», porque hasta ahora se ha estado hablando tanto de paz como de diálogo.

En referencia a la crítica de que no incluye un rechazo a ETA, indicó, entrevistado en la cadena Ser: «Cuando hemos hablado de paz ha sido con un no rotundo a la violencia, lema de la inmensa mayoría de la sociedad vasca».

Sobre las reticencias de algunas formaciones ante la convocatoria, advirtió de que la marcha no se va a realizar «para que un partido u otro se sienta más o menos cómodo, sino para que la sociedad tenga una forma de participación y nos exija a todos avanzar en un proceso de paz».

En su opinión, con este acto el Gobierno tripartito «toma el liderazgo e intenta trasladar a la sociedad una forma de participación activa».

Azkarraga confió en que no pase mucho tiempo para que comience un nuevo proceso de diálogo.

Por su parte, el portavoz de la Presidencia de EB, Mikel Arana, consideró una «buena noticia» la participación del PSE-EE en una manifestación que calificó de «legítima y necesaria».

Arana precisó que el PSE «ha rectificado» y «ha entendido finalmente que ésta es una convocatoria integradora y plural que suma voluntades a favor de la paz y el diálogo y en ningún caso busca personalismos ni protagonismos».