MADRID.-
El Ministerio de Fomento anunció ayer a través de El País que la compañía alemana LTU asumirá la mitad de la plantilla de Air Madrid, concretamente el 52% (568 trabajadores) a cambio de quedarse con sus rutas. No se trata de una venta, por tanto ni siquiera debe hacer frente a las deudas de la línea española de bajo coste.
Según el acuerdo, la aerolínea alemana acepta transportar a los pasajeros que tienen pendiente un viaje con Air Madrid hasta el mes de junio, eso sí pagando un suplemento de 250 euros por trayecto.
LTU International Airways es una de las principales líneas aéreas de Alemania. Cada año transporta 5,6 millones de pasajeros y cuenta con una flota de 26 jets que vuelan a más de 70 destinos en todo el mundo, con tarifas muy competitivas, por ejemplo Múnich-Alicante a 68 euros.
La empresa germana, pese a que ha sido deficitaria, lleva meses buscando un socio estratégico para crecer aún más, acercándose así a Lufthansa. Además, LTU al hacerse con los derechos de despegue de Air Madrid, consigue colmar una de sus principales aspiraciones, quedarse con las rutas de Latinoamérica.
Los trabajadores de Air Madrid desconocían anoche el acuerdo al que ha llegado Fomento con la compañía alemana. «Hoy hemos tenido una Asamblea para hablar sobre el ERE (Expediente de Regulación de Empleo) y los abogados de la compañía no nos han dicho nada. Esta noticia se suma a la gran confusión en la nos encontramos», asegura José Luis Fernández, portavoz del sindicato USO, quien añadió que «si se quedan con la mitad de la plantilla habrá que ver en qué condiciones».
En CCOO también hubo reunión ayer por la tarde, y tampoco se comunicó nada a los trabajadores sobre este acuerdo.
La jornada no estuvo exenta de incidentes, ya que los trabajadores de Air Madrid convocaron ayer manifestaciones y reuniones para reclamar a la compañía «el sueldo que se les debe y al Gobierno el amparo y protección que les corresponde».
Alrededor de 200 trabajadores, según los propios manifestantes, protestaron por su situación a golpe de silbatos y consignas contra el presidente de la compañía aérea, José Luis Carrillo. La jornada de ayer era la fecha límite que los trabajadores de Air Madrid fijaron para que su empresa les abonara la nómina correspondiente al mes de diciembre y los complementos de noviembre.
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