Tanto el técnico alemán como Quique Sánchez Flores, quien volverá a toparse en el camino con el club del que salió hace dos temporadas, creen que es el momento propicio para dar descanso a los jugadores que vienen actuando regularmente a lo largo de la temporada y dar una oportunidad a los suplentes, pese a que el entrenador valencianista considera que su equipo sufrirá para inclinar la eliminatoria a su favor: «El Getafe es un grupo muy hermético, que hace partidos muy cerrados en los que no hay grandes ocasiones de gol. Vamos a intentar hacer dos partidos serios e intentar pasar». El técnico valencianista también dijo que tiene puestas muchas esperanzas en la Copa: «Es una competición generosa porque con pocos encuentros puedes llegar a la final».