JOSÉ LUIS RODRIGUEZ
BARCELONA.-
El año 2006 se cerró con 20 motociclistas muertos en Barcelona, donde se produjo un aumento del 13,7% de los accidentes en los que se vieron implicados vehículos de dos ruedas respecto al año anterior.
El concejal de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Ferran Julián, dijo ayer que el incremento de los accidentes de motocicleta es debido «al 30% de las nuevas matriculaciones».Según afirmó el edil, «Barcelona es una de las ciudades europeas con mayor porcentaje de habitante por moto», ya que cuenta con un total de 250.000 motocicletas por sus calles.
Julián criticó el cambio de normativa introducida en 2004 por la DGT y que permite a los conductores con el carnet Clase B y tres años de antigüedad llevar una moto de hasta 125 centímetros cúbicos sin tener que pasar ningún tipo de preparación previa.Además, aseguró que «el 50% de los accidentes son protagonizados por los noveles».
Ante esta situación, el Ayuntamiento y la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos de dos ruedas organizan cursillos gratuitos desde julio, todos los sábados por la mañana, para intentar reducir el número de siniestros. Por el curso ya han pasado 160 voluntarios. Pero además, el Consistorio lanzó una campaña para concienciar a la gente, con el lema: «Circula amb precaució, evita accidents».
El concejal se pronunció a favor de las campañas ya que, según admite, «están funcionando bien, pero se necesita profundizar más en la sensibilidad, educación y concienciación» para reducir los índices de siniestralidad.
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