El Tribunal Supremo eliminó ayer uno de los dos obstáculos que mantienen paralizadas las Ofertas Públicas de Adquisición (OPA) sobre Endesa. Los magistrados acordaron levantar las medidas cautelares aplicadas a Gas Natural, que afectaban también al proyecto competidor de E.ON. Para que los propietarios de la eléctrica puedan decidir libremente el futuro de la empresa, sólo falta que el Juzgado de lo Mercantil dé luz verde este mes a la oferta catalana, una posibilidad muy factible a ojos de las partes implicadas.
El mercado bursátil recibió con júbilo la decisión del Supremo. Las acciones de Endesa se dispararon de inmediato, y se apuntaron al cierre la mayor subida del Ibex 35 (casi un 3%) y un máximo de cotización (36,48 euros). Los inversores agradecen cualquier movimiento que apunte al final de la larguísima batalla por el control de la eléctrica. Gas Natural lanzó su OPA hostil el 5 de septiembre de 2005. Cinco meses más tarde, E.ON presentó su contraoferta. Sin embargo, las dos propuestas quedaron congeladas por partida doble: el Supremo paralizó la autorización de la oferta catalana por el Consejo de Ministros; y la titular del Juzgado de lo Mercantil número 3 de Madrid, Miriam Iglesias, suspendió cautelarmente la OPA de Gas Natural.
La decisión adoptada ayer por el Supremo deja abierta la puerta a una pronta resolución de la pugna. El resultado de la votación fue de 16 votos contra 15 en una división insólita en la Sala Tercera. De hecho, fue decisivo el voto final del presidente de la Sala, Ramón Trillo.
Derechos políticos
Según el orden establecido para desarrollar el debate, los magistrados rechazaron, en primer lugar, la petición de Endesa de cambiar las medidas cautelares por la suspensión de los derechos políticos de Gas Natural (en el caso de que prosperase su OPA antes de que el Supremo resolviera sobre el fondo del asunto). Desechada esta posibilidad, comenzó un encendido debate en el que se formaron dos bloques distintos de los que se enfrentaron el pasado abril. Trillo, que se pronunció en contra de la suspensión en la pasada primavera y perdió la votación, actuó en este ocasión como ponente, proponiendo el levantamiento de las medidas cautelares. Junto a él se alinearon esta vez algunos de los que sí habían votado anteriormente a favor del varapalo al Gobierno.
Este bloque, que ganó finalmente, defendió que si las partes querían retirar la petición de suspensión, el Supremo debía atenderles. El otro bloque sostenía que lo que estaba en juego era el interés de los consumidores y que los magistrados estaban obligados a velar por ellos, incluso si Endesa desistía de su denuncia. Finalmente perdieron, pero los magistrados del Supremo pueden presumir, con la suspensión durante ocho meses de la OPA de Gas Natural, de haber contribuido a una subida de la cotización de Endesa -al dar tiempo a Acciona para entrar en escena-.
A partir de ahora, el Supremo deberá preparar su sentencia definitiva y pronunciarse sobre el fondo del asunto. Los magistrados tendrán que clarificar si el Gobierno vulneró la ley autorizando la OPA de Gas Natural, pese a la prohibición previa del Tribunal de Defensa de la Competencia, cuyos miembros advirtieron sobre los riesgos para los consumidores. De llegar a esta conclusión en los próximos meses, el Ejecutivo se llevará otro varapalo (ya sufrió el de la Comisión Europea). Si falla finalmente a favor del Gobierno, Endesa deberá abonar 1.000 millones en concepto de indemnización por el daño causado a Gas Natural.
Superado el trámite del Supremo, lo que ocurra ahora en los juzgados madrileños de lo Mercantil será decisivo para el futuro de Endesa. Las medidas cautelares podrían levantarse esta misma semana.
Debate en la Audiencia
La Audiencia Provincial de Madrid estudia hoy el recurso presentado por Gas Natural e Ibedrola contra la paralización de la OPA. Los magistrados pueden concluir que la juez no tenía motivos para congelar la operación y dar luz verde a la oferta catalana. La multinacional presidida por Wulf Bernotat se beneficiaría de esta hipotética decisión, puesto que su proyecto no echará a andar hasta que el de Gas Natural esté totalmente desbloqueado en los juzgados.
Según fuentes jurídicas, lo más probable es que la Audiencia Provincial devuelva el caso al Juzgado de lo Mercantil. Si se da este supuesto, la decisión sobre las cautelares podría estar tomada, como muy tarde, a finales de enero. Lo único que puede retrasar el asunto es la recusación de la juez, efectuada por Gas Natural e Iberdrola. Sobre los magistrados de la Audiencia Provincial también recae la decisión de inhabilitar a Miriam Iglesias o mantenerla al frente de este proceso.
Si la Audiencia de Madrid levanta las cautelares, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) dará inicio al proceso de aceptación. Los accionistas de Endesa podrán elegir libremente una de las tres opciones que determinarán el futuro de la primera eléctrica española: acudir a la OPA de Gas Natural, vender sus títulos a E.ON o respaldar el proyecto de la actual dirección, liderada por el presidente, Manuel Pizarro. La CNMV dará un plazo cercano a los dos meses, durante el cual Gas Natural y E.ON podrán mejorar sus respectivas ofertas mediante el procedimiento de sobre cerrado. Según los cálculos de las empresas implicadas, el desenlace final -o lo que es igual, si Endesa cambia o no de dueños- se conocerá a principios de abril.