El Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión Federal de la Policía (UFP) denunciaron ayer el mal estado en que se encuentran las motocicletas de proximidad del Cuerpo Nacional de Policía. Según el SUP, la moto «no es el medio más adecuado para realizar persecuciones ni para patrullar de uno en uno».
El secretario de Comunicación del SUP en Madrid, Miguel Angel Fernández, señaló «que las motos no se revisan y que los agentes no disponen de los uniformes más adecuados» y utilizan cascos particulares o los oficiales que «tienen más de tres o cuatro años», lo que equivale a «ir desprotegido».
Para la UFP la moto en la que murió el agente «no es apta para realizar el servicio y no es un vehículo válido para la función policial». «Son motos muy falsas, automáticas, de rueda pequeña y que derrapan con mucha facilidad, y ya ha habido muchos accidentes de agentes con estos vehículos», dijo José Canales, secretario regional de la UFP.
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