La reacción del AMB, a través de un comunicado, llegó sólo un día después de que trascendiera que la mitad de las empresas de la periferia de Barcelona incumplen la normativa al presentar niveles por encima de la ley en diferentes aspectos, según datos facilitados por la EMMA.

«Cuando se habla de incumplimiento -indica el comunicado del AMB- no debe entenderse que las empresa no hayan hecho ningún esfuerzo para tratar el agua, algo que sería motivo de una sanción grave». El AMB señaló que ese incumplimiento significa que uno o más parámetros de la muestra analizada no se corresponden con los baremos de agua asimilada en el agua doméstica.

Según la EMMA, el tipo de actividad de las empresas determina que, antes de verter el agua a los colectores, deban tratarla y conseguir que sea asimilada al agua residual doméstica.

Este sector productivo -químicas, metalúrgicas, de la alimentación o del papel- representa un millar de industrias de un total de 5.400 censadas en el territorio metropolitano. Ese millar, que representa un 18% de las industrias metropolitanas, son las inspeccionadas, según datos de la EMMA.

Este ente toma muestras periódicas de las industrias potencialmente contaminantes; en concreto, 1.200 anuales en este sector. De cada una de ellas se analiza una media de 20 parámetros. Según los datos de la EMMA, los resultados dan un 44% de incumplimientos en uno o más parámetros.