La lesión de María José Rienda ha dejado a Carolina Ruiz la responsabilidad de ser la primera espada del esquí español. En un año marcado por la escasez de nieve, no se deja amilanar por la responsabilidad y tiene claros sus objetivos: acabar en un buen puesto en la Copa del Mundo y, sobre todo, luchar por una medalla en el Campeonato del Mundo de febrero.
Pregunta.- Este año, sin Rienda, ¿siente más presión por lograr resultados?
Respuesta.- No, porque las disciplinas son distintas y en cada una hay unas opciones diferentes. Pero, por supuesto, la gente se ha acostumbrado a los resultados de María José. Ha dejado el listón muy alto y ha sido muy buena para el esquí español.
P.- ¿Se nota su tirón en nuevas vocaciones?
R.- Sí, cada vez hay más gente que se anima a entrenar para llegar a competir. Pero, además, ha sido muy buena para la Federación, porque ha popularizado el deporte y eso se nota en que hay más patrocinadores que quieren invertir al darse cuenta de que hay un equipo español fuerte, que no es sólo ella.
P.- ¿Y eso no le hace no sentirse responsable de que siga así?
R.- No, mis objetivos siguen siendo los mismos. Quiero quedar entre las 20 ó 30 primeras de las disciplinas de velocidad. Y luego está el Campeonato del Mundo, donde mi meta es siempre buscar medalla. Al ser sólo un día, te lo juegas todo en un minuto y medio, dos minutos, y siempre hay más posibilidades.
P.- Entonces, ¿cree que el podio es una posibilidad real?
R.- En supergigante, sobre todo. En un Mundial, con un buen dorsal, un buen día, y si lo aprovechas, la medalla está ahí.
P.- ¿Le está afectando la falta de nieve?
R.- Sí, sobre todo en Europa. Está habiendo muchos aplazamientos de días y lugares. Pero, al menos, no está siendo grave, de momento.
P.- Una manía.
R.- Dormir siempre con mi almohada. La llevo en mi maleta de mano, para evitar que se me pierda.
P.- ¿Dónde pasó sus últimas vacaciones?
R.- Recorriendo Italia de norte a sur, en un camper. Fue una experiencia fascinante. Disfruté muchísimo con esas grandes ciudades, como Roma, tan grandes y llenas de historia. Y, sobre todo, del mar de Sicilia. De verdad que pensaba que había que irse al Caribe para ver un lugar así.
P.- ¿Qué no soporta?
R.- Depende del momento. Por lo general, soporto muchas cosas, porque no le doy demasiada importancia a las cosas que no me gustan.
P.- Un libro y una película.
R.- Libro, Los Pilares de la tierra, de Ken Follett; película, Million dollar baby.
P.- Sexo de día o sexo de noche.
R.- Pues... De noche, no por nada en especial, pero prefiero de noche.
P.- Lo mejor y lo peor de usted.
R.- Lo mejor, que soy muy cabezota y cuando quiero algo no paro hasta que lo consigo. Y lo peor, pues lo mismo, porque me obsesiono demasiado a veces.
P.- Nombre para un hijo o una hija.
R.- Para el niño, no lo he pensado. Para la niña, Millaray. Es un nombre indio y me encanta desde siempre, porque mi madre me lo quiso poner a mí y al final no lo hicieron. Siempre me ha encantado.
P.- Su otro deporte.
R.- Mountain bike.
P.- Un sueño.
R.- Bufff, muchos. Cada noche uno. En serio, deportivamente, con una medalla olímpica o mundial; y en la vida, lo que todo el mundo, tener una familia, salud y una vida tranquila.
P.- ¿Cómo se ve por televisión?
R.- A veces rara, como si fuera disfrazada, con el casco y todo lo demás, aunque la verdad es que me veo pocas veces.
DNI
1981: Nace el 14 de octubre en la ciudad de Osomo (Chile). 1998: Debuta en la Copa del Mundo. 2000: Firma la mejor actuación de una esquiadora española desde Blanca Fernández Ochoa, al acabar segunda en el gigante de Sestriere. Termina subcampeona mundial júnior de gigante. 2001: Logra el bronce mundial júnior de gigante. 2002: Participa en sus primeros Juegos Olímpicos, en Salt Lake City. 2006: Participa, sin éxito, en los Juegos Olímpicos de Turín.