La III Conferencia que se reunió el jueves en el Senado acordó crear una comisión paritaria con delegaciones de los gobiernos autonómicos de La Rioja, Madrid, Andalucía y Castilla-La Mancha, es decir, dos del PP y dos del PSOE, y presidida por el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla.

Éste aseguró a este periódico que en los próximos días se dirigirá a los consejeros de Presidencia de estas comunidades para formalizar la comisión.

Según Sevilla, el acuerdo podría estar cerrado antes de verano, para aplicarse en la próxima Conferencia de Presidentes. Su idea es que no sea un reglamento rígido con un funcionamiento burocrático, pero que regule los trabajos previos, los plazos para presentar las propuestas, la forma de establecer el orden del día y los turnos de intervención y el protocolo de actuación.

En todo caso, el ministro mostró su satisfacción por el desarrollo de la Conferencia y afirmó que «ha servido para consolidar la institución como lugar de encuentro al más alto nivel». Sevilla alegó que la idea es evitar que suplante al Parlamento y, por eso, fue pertinente rechazar la petición de las comunidades del PP de introducir la lucha antiterrorista en el debate, antes del Pleno del lunes.

«De hecho», añadió, «fueron ocho horas y media de discusión en las que sólo se dedicó una a ETA y el resto sirvió para incrementar la cooperación sobre el agua, la inmigración y la ciencia y la tecnología.