LUIS F. DURAN
El Metro no vuela, se arrastra, dice el PSOE. José Quintana, diputado y portavoz socialista de Transportes, señaló ayer que las averías e incidencias del Metro «han aumentado un 32% respecto a 2005» y que en los doce primeros días de este año «se han producido ya cinco incidentes, mientras que en el mismo período de 2006 no se registró ninguno».
Asegura Quintana que, de acuerdo con los datos de la Encuesta Domiciliaria de Movilidad, en el Metro sólo se han incrementado un 3% el número de viajeros después de las nuevas ampliaciones que, recordó, han costado 5.000 millones de euros.
La última avería de envergadura del Metro ocurrió el pasado 6 de diciembre cuando un tramo de la línea 9 estuvo sin funcionar por una avería. El 29 de noviembre no funcionó durante siete horas la línea 4 como consecuencia de una contratiempo en la catenaria.
También el servicio de Metro de la línea 9 entre las estaciones de Plaza de Castilla y Colombia permaneció interrumpido tres horas el pasado 5 de octubre.
Asimismo, los usuarios de la línea 5 de Metro de Madrid se llevaron un susto el 6 de julio. Uno de los trenes de la línea verde, que une las estaciones de Canillejas y Casa de Campo, tuvo que ser desalojado a las 15.00 horas. La empresa de transporte urbano optó por hacer salir a los viajeros en la estación de Gran Vía porque el motor del vehículo se había recalentado. Ese día no hubo altercados.
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