Si no estamos en paz con nosotros mismos, no podemos guiar a otros en la búsqueda de la paz (Confucio)
CRONICA
LA VENTANA
LA POLICIA NUNCA DEFRAUDA
ANTONIO LUCAS
El historiador Felipe Fernández-Armesto tiene la frente despejada del sabio prematuro, los ojos rozados por la luz de los flexos, la musculatura justa del que se ha empeñado más en regar las ideas que en cebar los tríceps: un tipo cuyo aspecto niega cualquier posibilidad de peligro. Pero un madero de Atlanta decidió que un ser así, con ese desamparo de fuerza, encierra una amenaza. Y le dio el alto al cruzar una calle, y pidió refuerzos, y entre siete lo brearon con las cámaras delante. La policía de EEUU (y de tantos sitios más) gasta una arrogancia salvaje y delictiva. Lo mismo da ejercerla contra un rapero inocente que contra un sabio que ahí llega. Bush les ha dado esta licencia.