Éstas son las recomendaciones adoptadas por el Consejo de Diseñadores de Moda de Estados Unidos para identificar desórdenes alimenticios que afecten a alguna princesa de la pasarela, de cara al evento neoyorquino, entre el 2 y 8 de febrero.

En líneas generales, el Consejo promoverá «un ambiente de trabajo y un estilo de vida más saludable para las modelos», pero no prohibirá desfilar a las chicas con bajo peso, a diferencia de lo establecido el año pasado en Milán y Madrid.

Esas dos capitales decidieron vetar a las modelos con masa corporal inferior a 18, menos del mínimo según la Organización Mundial de la Salud (OMS). «Creo que deberíamos promover la salud como parte de la belleza, en vez de establecer reglas», dijo en Nueva York la diseñadora Diane von Furstenberg, que participó en el debate.