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En mayo de 2005 todos los grupos parlamentarios menos el del PP aprobaron una resolución en la que autorizaban al Gobierno a dialogar con ETA si se constataba una «voluntad inequívoca» de la banda de dejar las armas. La resolución ha vuelto esta semana a la actualidad después de que Mariano Rajoy haya anunciado que propondrá en el Congreso su anulación. Hay quien cree que no es necesario porque la bomba de la T-4 invalida de facto cualquier negociación con la banda. Sin embargo, la inmensa mayoría de los lectores de EL MUNDO creen que revocarla sería un buen paso para volver a la senda del consenso antiterrorista.
Contra una mafia
La anulación de la resolución del Congreso sería un golpe contundente para ETA y su entorno, ya que reflejaría de modo claro una oposición unitaria y, lo que es más deseable, una política conjunta de los partidos democráticos basada en la persecución de esa banda mafiosa terrorista mediante los medios autorizados por el Estado de Derecho. De no hacerlo, ETA entendería que la legalización de Batasuna para las elecciones municipales es una futura realidad y se les daría una cobertura económica legal que siempre se utilizará para el mantenimiento de esa mafia, porque no es otra cosa. Senén Rivera. Correo electrónico.
Un político ingenuo
Lo que creo que ha ocurrido aquí es que Zapatero ha sido un ingenuo y pensó que con esos asesinos se podría dialogar tranquilamente sin pagar un alto precio. Llamar «proceso de paz» a dicho entendimiento es un insulto para los españoles que no comulgamos con los etarras porque aquí nadie está en guerra con nadie. El único diálogo que cabe es: «Vosotros dejáis las armas para siempre y ya veremos cómo solucionamos lo de los presos porque todas las demás reivindicaciones de los etarras, perfectamente secundadas por el PNV y Batasuna, son infundadas, fruto de una mentira que se ha transmitido a dos o tres generaciones y que se ha enquistado en la sociedad, mentira que se parece por cierto bastante a la paranoia hitleriana. Resulta duro escuchar algunas frases que acusan a los españoles de represores y a todos los que no votan y siguen ciegamente al iluminado de Zapatero de antidemócratas y belicistas. Remedios Jurado. Correo electrónico.
No es necesario
Me parece bien que el PP se esfuerce por dejar al presidente expuesto públicamente frente a sus contradicciones y por ello creo adecuado que se intente anular de iure la autorización. Sin embargo, debe quedar claro que tal anulación no es necesaria pues la autorización incluía la condición de que ETA dejara las armas por lo que desde el 30 de diciembre el Gobierno no está ya autorizado por el Congreso para negociar con ETA. Antonio Obón. Madrid.
Violencia continua
El Congreso autorizó al presidente del Gobierno a iniciar el diálogo con ETA en ausencia de violencia. Como es público y notorio, en los últimos nueve meses no solamente esta organización no ha dejado la violencia sino que la ha aumentado hasta límites insostenibles, culminándola con el atentado de Barajas, por lo que me parece necesario que el Parlamento desautorice al presidente y le censure su conducta, toda vez que no ha cumplido con el mandato exigido. Si en España hubiera una auténtica democracia, el presidente ya habría dimitido y convocado elecciones. Carlos Flores. Correo electrónico.
Apoyo al presidente
No es el momento de propuestas que nos dividan más. Es el momento de ponerse al lado del presidente y luchar juntos contra el enemigo común. No entiendo que el PP trate de remover rencillas del pasado y de sacar réditos de un atentado. Zapatero y Rajoy deben ir juntos en este asunto. Oscar F. García. Murcia.
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