El Ayuntamiento de Madrid amplía su política de caza de gatos y arrecia la ofensiva contra los del parque del Retiro. Después de varios meses atacando de mala manera a los del Canal de Isabel II, y de acosar y amenazar de forma indecente a los cuidadores, incluso en su propia casa, como le ocurrió a Juanita Navazo, ahora despliega a su Policía Municipal por El Retiro, cosiendo a multas, amenazando sin pudor con expedientes administrativos. Y retirando las casetas en las que las pobres bestias se han estado cobijando.

Durante años, estos animales han sido atendidos por ciudadanos particulares, en lo personal o formando parte de asociaciones. Son personas y entidades que, de su propio bolsillo, hacen que Madrid no sea conocida como la ciudad matadero de gatos.

Las políticas municipales de quitar a los animales domésticos de circulación mediante el procedimiento jurásico y barato de matarlos son de por sí vergonzosas. Pero es de energúmenos desarrollar esa política ampliándola hasta el extremo de prohibir que se les alimente bajo amenaza de multas: o los mato yo, o que se mueran de hambre.

Contrariamente a lo que las administraciones municipales dicen, los gatos de las colonias controladas están esterilizados, vacunados, testados, alimentados con pienso seco y vigilados. Y así funcionan los países de nuestro entorno europeo, algunos de los cuales incluso los tienen protegidos como Patrimonio Biocultural.

Nos preguntamos si la Policía Municipal ya sale con la consigna de buscar alimentadores de gatos para rellenar boletas de multa. Y si son boletas especiales en las que las palabras «foco de insalubridad» ya vienen de imprenta en el apartado «concepto».

Los tres estamentos municipales que hemos consultado en relación con El Retiro, encadenados jerárquicamente, niegan tener la menor noticia de esto. Y la cuestión es que allí se acosa y se atemoriza.

Angela Anessi

Los mininos, en casa de quien los quiera

No querrás que los gatos críen y nos invadan, ¿no? Habrá que controlar el crecimiento desenfrenado gatuno. Y es que muchos de ellos son como las palomas: portadores de enfermedades, pulgas, garrapatas... Quien quiera gatos, en su casa.

I.

Hay cosas más insalubres que un gato

O sea, que es insalubre ver gatos paseando por El Retiro... Es insalubre alimentarlos... Pues yo considero más insalubre cómo dejan la calle los mendigos y yonkis. O si no, que alguien se pase por cualquier otra zona de la ciudad donde esta gente acampa para ver si no es insalubre... Dejen a los gatos en paz.

I.

Es fácil alimentarlos, sin responsabilidades

Estoy totalmente en contra de que se mate a los animales, pero si alguien quiere tener gatos, que los tenga en su casa. Que es muy fácil dar de comer a los animales sin tener más responsabilidad sobre ellos.

U.

Los felinos son el problema más leve

Es fácil opinar sin saber de qué se habla. Es bastante más problemático un perro callejero que un gato en cuestión de enfermedades, por ejemplo, y además, un gato enfermo no supone ningún problema de salud para el ser humano. Y eso partiendo de que los gatos estuvieran libres como pájaros, que por lo que dice la autora de la primera opinión no es así. Yo creo que tanto en El Retiro como en otras muchas zonas de Madrid hay muchas cosas más importantes de las que encargarse que de los gatos. En El Retiro concretamente hay otros «animales» que incordian mucho más y que sí «distribuyen» cosas que generan enfermedades.

Un poco de seriedad y sentido común, por favor.

Mincha