C. U.
MADRID.-
La subida de los impuestos y tasas al consumo en vigor en Alemania desde el pasado 1 de enero y cierto clima de confianza en la recuperación de la economía germana dieron un notable empujón a las marcas y fabricantes de automóviles de aquel país en el cierre del ejercicio 2006.
Gracias a la medida, el pasado diciembre marcas como Mercedes-Benz o BMW dispararon las entregas de vehículos a ritmos superiores al 20% comparados con el mismo mes del año anterior. Otras firmas de gama alta, como Audi, también se vieron impulsadas por la llegada del nuevo IVA, que, en general, hizo crecer las ventas de automóviles en Alemania por encima de 300.000 unidades o un 17% más.
La situación del mayor mercado europeo de automóviles consiguió así maquillar lo que en circunstancias normales hubiera sido un ejercicio negativo o muy negativo en la mayor parte de los países que habitualmente registran mayor volumen de matriculaciones. En Reino Unido las ventas bajaron un 3,9%; en Francia un 3,3% y en España un 2%. Además de Alemania, la nota de contraste la puso Italia, donde las ventas crecieron un 3,5%. En su conjunto, los ciudadanos pertenecientes a los países de la Unión Europea (UE) y la Zona Europea de Libre Comercio (Islandia, Noruega y Suiza) adquirieron 15.254.593 nuevos turismos en 2006, un 0.7% más que el año anterior, según datos de la Asociación Europea de Constructores de Automóviles (ACEA).
Falta de modelos
«La incertidumbre de los compradores alimentada por la volatilidad de los precios de los carburantes y las subidas de los tipos de interés fueron, además de la falta de nuevos modelos, las razones que más explican la evolución de las ventas en distintos países el año pasado», aseguró la asociación europea de fabricantes.
Gracias al buen comportamiento en sus países de origen, Fiat y Volkswagen fueron los grupos que mejor capearon las dificultades que encuentra el mercado europeo para crecer. El fabricante italiano -propietario de las marcas Fiat, Lancia y Alfa Romeo - fue el que más mejoró su actividad comercial con la entrega de 1.264.946 unidades, un 17,6% más, y una cuota de mercado que lo sitúa de nuevo en los niveles previos a su grave crisis financiera.
Por parte de Volkswagen (VW), 2006 fue un ejercicio positivo en todas sus marcas -VW, Audi, Skoda y Seat- de forma que prácticamente uno de cada cinco coches vendidos en Europa generó ingresos para la compañía con sede en Wolfsburg. El paso fugaz de Wolfang Bernhard por la dirección de la compañía hizo resurgir las ventas en VW y Skoda. Seat cerró el año entregando 357.243 unidades, un 3,2% más.
En el lado de los que peor encajaron 2006 destacan los fabricantes franceses Renault (-10,9%) y PSA (-2,2%). Las marcas asiáticas refrenaron su pujanza con avances moderados o, en el caso de las coreanas Hyundai y Kia, retrocesos.
|