El estudio encargado por la Generalitat, en el que han participado durante un año diversos biólogos que han analizado 100 puntos del litoral catalán, demuestra un descenso de erizos de mar cifrado en un 30% desde 1992. Las medidas adoptadas por la Generalitat son, la ampliación de la veda actual de seis a ocho meses. Del 1 de abril al 30 de noviembre, se ha suspendido temporalmente la concesión de licencias. También se está estudiando una reducción de la cantidad de erizos que podrán coger al día, y se ha aumentado la medida que deberán tener los ejemplares. En esta línea, también crearán una comisión que acogerá a todos los sectores, biólogos, restauradores, ecologistas, mariscadores y la administración, para hacer un seguimiento de las comunidades de este marisco.

Además, la Generalitat también intensificará las inspecciones a restaurantes y perseguirá el furtivismo. La campaña de la Garoinada se celebra este año y Sans avanzó que su continuidad dependerá de la comisión, aunque matizó que no es la causa directa de la disminución de esta especie, porque existen otros factores que también influyen.