L. A. SANZ
Lo anunció Esperanza Aguirre en el último Debate sobre el Estado de la Región (septiembre) y ayer dio su primer paso al frente público. El vicepresidente regional y portavoz, Ignacio González, anunció en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que se está consensuando con más de 100 organizaciones un «gran pacto social» contra la anorexia y la bulimia que incorporará medidas concretas «para luchar contra esta terrible enfermedad».
La próxima edición de la Pasarela Cibeles, que se celebra en febrero, volverá a exigir un índice de masa corporal 18 para poder desfilar. Pero las medidas no se quedarán ahí. La intención el Ejecutivo de Madrid es que se controle la venta de productos dietéticos, que las dietas estén avaladas por nutricionistas, que se controlen las tallas de la ropa y las campañas sobre productos milagro que prometen adelgazar sin garantías sanitarias.
El Gobierno regional creará también el Instituto de Nutrición y Trastornos Alimentarios de la Comunidad de Madrid que ofrecerá información, cursará denuncias y permitirá sugerencias y adhesiones al Pacto contra la Anorexia.
Además, González anunció que el Grupo Popular en la Asamblea, que dirige Antonio Beteta, presentará una proposición no de ley (PNL) para instar al Gobierno de la Nación a que lidere una iniciativa similar a la de la Comunidad de Madrid en toda España.
Todas estas medidas fueron presentadas al Consejo de Gobierno por el consejero de Economía, Fernando Merry del Val, aunque en el proyecto están implicadas otras cuatro consejerías: Sanidad, Familia, Educación y Cultura.
Según el informe presentado ayer, la iniciativa regional coordinará las actuaciones y compromisos con los distintos agentes sociales para difundir entre los madrileños, especialmente entre los jóvenes, «una imagen saludable» en contraposición a la que muchas veces se ha mostrado como deseable con modelos de extrema delgadez en desfiles, en la publicidad o en los medios de comunicación.
Entre las organizaciones con las que está contando la Comunidad de Madrid están varios colegios profesionales, agentes sociales, asociaciones de pacientes y familiares, organizaciones de consumidores, agencias de modelos, además de la Institución Ferial de Madrid (Ifema) o la Federación Madrileña de Municipios (FMM).
El vicepresidente insistió en que el objetivo de este Pacto es «concienciar y alarmar a la sociedad del efecto pernicioso que determinadas prácticas, especialmente alimentarias o dietéticas no indicadas ni controladas en muchos casos por especialistas, pueden provocar de cara sobre todo a los jóvenes» y hacerles caer en la anorexia y la bulimia.
Según añadió González, el futuro Pacto será además «una oportunidad» para «reforzar e incorporar» medidas que refuercen y mejoren la asistencia a enfermos con trastornos alimenticios.
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