No sabemos si Manuel Pizarro, presidente de Endesa, y Wulf Bernotat, presidente de E.ON, han visto Reservoir Dogs, la primera película de Quentin Tarantino. Lo que sí podemos afirmar es que han sido los protagonistas de su remake en clave empresarial. En aquella, un violento pero divertido grupo de ladrones ocultaba sus nombres de pila bajo diversos colores para esconder sus identidades y evitar posibles delaciones futuras y que la policía les identificara.
Ahora, casi 15 años después del estreno de ese film, los máximos responsables de Endesa y E.ON, así como sus asesores y equipos jurídicos, han decidido esconder su identidad bajo los colores Blue (azul) y Red (rojo), respectivamente, en el marco de las reuniones preparatorias de la OPA. Todo comenzó en enero de 2006, cuando Manuel Pizarro y su consejero delegado, Rafael Miranda, buscaban un caballo blanco para defenderse de la Oferta Pública de Adquisición (OPA) lanzada en septiembre de 2005 por Gas Natural. La alemana E.ON apareció en escena y se iniciaron los contactos.
Los directivos y asesores de Endesa y E.ON involucrados en los contactos optaron por seguir las enseñanzas de Tarantino y trabajar en clave. Nadie debía conocer la existencia de las reuniones entre ambas compañías ni sus participantes, así que lo mejor era utilizar nombres falsos. El plan para que E.ON presentara una OPA sobre Endesa fue bautizado en enero de 2006 como Proyecto Taurus. Desde entonces, Endesa aparecería sustituida en todos los documentos por Blue, y E.ON haría lo propio con Red, que a la sazón son los colores que definen la imagen corporativa de ambas compañías.
Del 'orange' al 'grey'
Peor color se reservaba para el tercer protagonista en la batalla por el control de Endesa. El agradable naranja con el que Gas Natural adorna su imagen corporativa fue sustituido por el triste Grey (gris), bajo el que la gasista presidida por Salvador Gabarró aparecería en los documentos del Proyecto Taurus. Todos estos detalles y muchos más figuran en el escrito que ayer envió Acciona, que controla el 21,03% de Endesa, a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Este escrito es una ampliación del que la constructora ya envió al regulador financiero el pasado martes, solicitando a éste que «ordenase a E.ON modificar su folleto de OPA para incorporar aquella información confidencial de Endesa a la que habría tenido acceso, según un artículo de prensa».
Sin embargo, el escrito enviado ayer adjunta un extenso documento de 85 páginas en el que se recoge información exhaustiva sobre el Proyecto Taurus, los análisis y previsiones realizados por los equipos Blue y Red, así como información financiera y estratégica de las compañías.
En el escrito, Acciona afirma que ha podido confirmar la veracidad de aquella información de prensa, por haber descubierto la fuente de ésta: el registro electrónico de la Corte Federal del Distrito de Nueva York, donde figura colgada la documentación del procedimiento judicial abierto por Gas Natural contra E.ON en Estados Unidos. Según Acciona, el Proyecto Taurus «incluye contenidos de índole financiera, estratégica y sobre riesgos futuros de Endesa, relevantes todos ellos para valorar las acciones de Endesa». Toda esta información ha estado a disposición de E.ON y, sin embargo, «no se ha puesto a disposición del público en España ni, en particular, en el folleto hasta ahora, y por tanto a los inversores no les ha sido posible tenerla en cuenta para valorar, en igualdad de condiciones que E.ON, sus acciones en Endesa».
Así, la constructora de los Entrecanales acusa a Endesa de ocultar a los accionistas españoles toda la información relevante de la que sí ha dispuesto E.ON. Ni Acciona ni Caja Madrid ni los minoritarios han tenido acceso a ello. Así, la constructora pide la modificación del folleto de OPA y se reserva la posibilidad de entablar acciones judiciales futuras contra Endesa por los perjuicios ocasionados a sus accionistas.
Documento confidencial
Todas las páginas del Proyecto Taurus tienen el sello de Confidencial en la parte inferior y incluye frases tan en clave como: «Blue no ve ningún riesgo proveniente de Grey si Red tuviera éxito», o lo que es lo mismo, que los equipos de trabajo no ven riesgo para Endesa en enfrentarse a Gas Natural, de forma que si E.ON gana la OPA, el suministro de gas estaría garantizado y a buen precio para la eléctrica española. No tan en clave aparecen los nombres de los participantes en las reuniones. Por blue, «J. Valcárcel, I. Antoñanzas y E. de las Morenas»; por red, «Dr. R. Pohlig, K. H. Feldmann, Dr. F. Fischer y Dr. F. Possmeier».
Acciona denuncia en su escrito que en la reunión del 25 de enero de 2006, Endesa avisa a E.ON de que su previsión de beneficio operativo bruto (ebitda) para 2009 es «conservadora» y se situará en los 8.000 millones de euros, en lugar de los 7.500 millones anunciados al mercado. También Endesa informa a la alemana de que, si se hace con el control, «podría obtener entre 80 y 100 millones de sinergias o ahorros en gastos», además de garantizarle que si hay «cambios en el control de Endesa o sus órganos de dirección por un nuevo accionista extranjero, ninguno de sus contratos principales se vería afectado». En la reunión del 1 de febrero, Endesa explicó a E.ON que una oferta exitosa de la alemana «no afectaría a la capacidad de Endesa para hacer uso de nuevos créditos fiscales de 392 millones».
Por su parte, Endesa afirmó ayer a la CNMV que Gas Natural no se ha dirigido «en ningún momento» a ella para solicitar información que le permita una mejora de los términos de su OPA, y destacó que la información que ha entregado a E.ON «no ha sido en ningún caso información privilegiada», sino que se trata de información conocida por el mercado.