ESPAÑA 33
EGIPTO 29
Barrufet
Davis (7)
Romero (3)
Chema R. (4)
Garralda (1)
G. Parrondo (3)
Uríos (5)
Hombrados (p)
A. Entrerríos (4)
Juanín García (3)
R. Entrerríos (1)
Juancho Pérez
Belaustegui (2)
Garabaya (-)
Bakir
El Ahmar (11)
Hussein (1)
El Fakharany (-)
Ibrahim (2)
Zaky (8)
Yosry (2)
Eldin (p)
s.c.
Awad (2)
Sayed (2)
Karam (-)
Osman (-)
Elsalam (1)
Awwad (-)
Arbitros: Vakula y Ludovik (UCR)
AWD DOME DE BREMEN. 7.500 ESPECTADORES.
Exclusiones: G. Parrondo, Garabaya, Garralda, El Fakharany, Ibrahim (2), Elsalam y Hussein.
Parciales: 2-3, 4-6, 6-8, 10-12, 13-15, 16-16 (Descanso) 18-20, 19-20, 21-22, 26-24, 30-27 y 33-29 (Final).
La selección española comenzó su reválida en el Mundial de Alemania secándose el sudor. Egipto obligó a un esfuerzo inmenso para vencer un partido pleno de trampas. Ganaron los chicos de Juan Carlos Pastor agarrados a la defensa, ya en la segunda parte, y a dos hombres de puestos clave. Hombrados y Chema Rodríguez levantaron al equipo tras el descanso para enderezar una cita de tensión y miedos. Iniciar un torneo tan apretado en fechas con una derrota te deja cojo para el resto del calendario, por lo que eran obligados los puntos del debut, a pesar de las dificultades de un rival durísimo.
El portero y el central frenaron los arreones de Egipto, que dominó en el marcador durante 49 minutos. Hombrados dio el relevo a un Barrufet impotente en el bombardeo africano. Zaky y El Ahmar (11 goles) hicieron dudar a España en la primera parte. La defensa era liviana ante un bloque veloz, que decidía las jugadas sin adornos. Cada lanzamiento era una herida. El grupo de Pastor se precipitaba en los ataques quizá agobiado por los nervios del estreno. A Uríos le costaba recibir y los extremos se aburrían. El balón resbalaba. En los primeros cinco minutos se produjeron cuatro pérdidas. Egipto siempre mandaba (1-3, 4-7, 7-9...), mientras la defensa española se doblaba sin funcionar el avanzado en el 5-1 y con demasiadas grietas en el 6-0.
Pastor colocó en la pista a José Javier Hombrados para poner un muro. El primer lanzamiento lo paró. También los dos siete metros siguientes. Combustible de moral para el campeón, débil en el primer día de colegio. La calma impuesta por el portero del Ciudad Real permitió que la primera crisis se mitigara al borde del descanso, al que se llegó empatados (16-16) gracias a un gol de David Davis, el mejor artillero español ayer (7 tantos).
«El lugar donde empezó el balonmano» se leía en las vallas publicitarias del pabellón. Es el lema elegido por Alemania para el campeonato, con el que pretenden reivindicar sus derechos de autor respecto a este deporte. En la cancha, el último rey mundial del balonmano sufría. En la segunda parte, los cañoneros egipcios se relajaron, pero apareció el portero para multiplicar sus brazos. En una jugada detuvo cuatro lanzamientos distintos. Parecía un gigante. Como enfrente Hombrados. La cita estaba taponada, pero Egipto gozaba aún de ventajas (17-20).
Reventó el encuentro Chema Rodríguez. Aprovechó el desfonde físico rival y su imaginación hizo el resto. Lanzó entre huecos imposibles o asistió a Uríos con esas maneras de base de baloncesto que maneja. Belaustegui aportó desde nueve metros y España domó el marcador. La remontada es el mejor impulso posible para afrontar un campeonato implacable, donde España debe aprender y espantar la debilidad exhibida en el primer tiempo.
Pastor: «Nos hemos castigado demasiado»
BREMEN (ALEMANIA).- Juan Carlos Pastor se mostró satisfecho por el resultado, pero molesto por las debilidades defensivas del equipo en la mayor parte del partido. Le preocupa el desgaste sufrido para dar la vuelta a la cita en un torneo que no descansa. Hoy, España vuelve a la pista ante Qatar (15.45 h., La 2), un rival inferior al conjunto egipcio que ayer apretó a la selección. «Hemos tenido problemas hasta que no hemos asentado la defensa. No nos hemos metido en el partido hasta que estuvo realmente complicado», analizó al final el técnico del Valladolid. «Ha sido un choque duro, difícil, como ya preveíamos; además, el inicio de un gran campeonato nunca es sencillo por la obligación de ganar. No podemos negar que no hemos empezado bien», dijo.