Las nieves dejaron ayer sin clase (y con una sonrisa en la cara) a más de mil niños gallegos. El temporal se cebó en 40 puertos de montaña y en varias carreteras del norte de España. Hasta 300 camiones y dos autobuses fueron inmovilizados a medianoche en la A-1. El invierno por fin ha llegado, y a partir de mañana vendrán vientos más fuertes y descenderán de manera brusca las temperaturas.
La Dirección General de Emergencias y Protección Civil activó la alerta por nieve en 10 comunidades: Castilla y León, Navarra, Galicia, País Vasco, Cantabria, Asturias, Cataluña, Castilla-La Mancha, Andalucía -donde se esperaban temperaturas de hasta cuatro grados bajo cero- y la Comunidad de Madrid, donde se activó el mayor nivel de preemergencia y el Ayuntamiento de la capital preparó más de 7.000 toneladas de sal. La niebla cubrió el país de norte a sur.
Un total de 1.203 alumnos de 28 colegios de Orense, Lugo y Pontevedra se quedaron en casa. En 11 de los centros fueron suspendidas las clases, mientras que en el resto los chicos no pudieron llegar debido a que coches y autobuses no pudieron circular por carretera.
En la zona de O Caurel (Lugo), un núcleo de población quedó aislado por la nieve.
Por otra parte, 300 camiones fueron inmovilizados anoche por la Guardia Civil a causa de la nieve que castigaba la carretera que une Madrid con Burgos, según informa Pedro Blasco.
Los agentes pararon a los vehículos en los dos sentidos, desde el kilómetro 30 hasta el 110, ya en Burgos, según informaron fuentes del servicio 112 de la Comunidad de Madrid. Al parecer, la Guardia Civil tomó esta decisión después de que varios camiones se quedaran cruzados en la carretera.
Protección Civil envió un dispositivo especial en forma de alimentos, agua y 400 mantas, para atender a los camioneros y a los 40 pasajeros de dos autobuses atrapados por la nieve a la altura de la localidad madrileña de Robregordo, en plena cordillera de Somosierra. Los pasajeros finalmente fueron alojados en un hotel de la zona. Los turismos sólo podían pasar por la zona si iban provistos de cadenas.
También se vio afectada la circulación en una cuarentena de puertos de montaña de la red secundaria de carreteras del noroeste peninsular -nueve de ellos cerrados en Burgos y Cantabria- y a varias vías de la red principal en Orense, Pontevedra, Salamanca y Madrid, según informó la DGT. Hubo retenciones en la A-2, a la altura de la localidad madrileña de Alcalá de Henares, debido a que se produjeron desprendimientos.
Hoy el descenso térmico será acusado en toda la Península. Se esperan nevadas en torno a los 300 o 400 metros en el norte y entre 600 y 900 en el resto de España. El temporal se recrudecerá a partir de mañana y la cota de nieve descenderá y afectará a muchas ciudades. El viernes, y el sábado, las temperaturas volverán a suavizarse.
Se trata de un temporal «típico de enero» y que no reviste un carácter extraordinario, dijo a Efe el portavoz del Instituto Nacional de Meteorología, Angel Rivera, que sí llamó la atención sobre el hecho de que haya entrado inmediatamente después de unos días con temperaturas inusualmente altas.