Sr. Director:

Generalizar siempre es cruel e injusto. En Marbella vivimos más de 100.000 personas y el Ayuntamiento se ha convertido en una caja de resonancia que nos perjudica a todos.

Mi respeto a la libertad de opinión e información me obliga a considerar que cada uno tiene derecho a mirar la realidad a través del cristal que quiera utilizar, pero esos mismos derechos nos llevan a otros a discrepar y a denunciar actitudes de manipulación que muchos creemos que perjudican los auténticos intereses de toda la ciudad y, consecuentemente, a la sociedad que vive en ella.

La televisión dedica actualmente horas y más horas de programación con espacios de toda índole sobre Marbella, lo que estimo constituye un verdadero atentado a la objetividad informativa, ya que refleja una realidad socio-económica deformada y distorsionada. Las entrevistas a toda clase de personajillos, queriendo o sin querer, arruinan la reputación y destruyen el presente y el futuro de mucha gente.

Aunque no dispongo de datos sobre el nivel de credibilidad de la televisión, me consta que el ciudadano es muy receptivo a sus mensajes, por lo que pienso que habrá sido negativamente impactado por los comentarios de estos reportajes.

Marbella, gracias al esfuerzo de la iniciativa privada y a la imaginación de unos excepcionales promotores y técnicos, es un enclave turístico de primera categoría internacional y un producto español de alta rentabilidad en la economía de todo el país.

Ahora que se avecinan las elecciones municipales, los partidos no deberían desviar la atención de los múltiples problemas que tiene Marbella y excluir de sus campañas el tema de las demoliciones, en las cuales esperamos que se aplique la Ley, pero sin tanta demagogia como la que se está virtiendo sobre el asunto. Los partidos políticos tienen que trabajar por el bien del pueblo: sus votantes. Creo que lo ideal sería unir esfuerzos e ideas, haciendo después de las elecciones, si resultase necesario, una gran coalición entre el PP y el PSOE.

La televisión y los medios de comunicación en general deberían respaldar más el sector turístico, conscientes de su especial sensibilidad y fragilidad por fenómenos externos. Marbella está de moda y es un producto de calidad y exportable, elaborado por miles de españoles que han alcanzado un buen nivel de vida y que proporcionan elevados recursos para la balanza de pagos española.

No hay que avergonzarse por vivir en Marbella, por mucho que los medios aireen las fechorías de unos pocos.

Francesco S. De Perlac. Marbella.

Aclaración de Javier Bardem

Sr. Director:

El artículo de Carmen Rigalt publicado el pasado domingo, además de falaz -por cuanto habla de algo que no ha sucedido en absoluto-, creo que contribuye a alimentar esa crispación social que, en teoría, sólo en teoría, parece querer criticar.

El artículo era un triste ejemplo de cierto tipo de periodismo, carente de veracidad, que sólo sirve para alimentar una imagen de enfrentamiento entre la ciudadanía cuando, afortunadamente, la situación es mucho más normal de lo que este ejercicio de crispación-ficción inventa.

Desafortunadamente, hace mucho tiempo que no voy a degustar el delicioso menú del restaurante Casa Lucio, pero, siempre que he ido, tanto el personal como el mismo Don Lucio han demostrado que el trato humano y caluroso a sus comensales está a la misma altura que la excelencia de su comida. Y su variada clientela sólo goza del placer de sentirse como en casa.

Javier Bardem. Correo electrónico.

Enhorabuena por su artículo a Rosa Díez

Sr. Director:

He leído con gran interés el artículo publicado ayer por Rosa Díez, titulado: Por un pacto de Estado contra ETA.

Creo que el socialismo tiene en la conocida dirigente política a una persona que, de llegar a ser presidenta del Gobierno, garantizaría a su partido una época larga, muy larga y sin sobresaltos, en La Moncloa y al PP en la oposición. ¿Por qué mantener a Zapatero que, un día sí y otro también, tiene que hacer equilibrio sobre un alambre que se sostiene en una de sus bases por ETA y en la otra por el nacionalismo?

Robur. Correo electrónico.

El sector de los cítricos soporta una grave crisis

Sr. Director:

El vicepresidente segundo del Gobierno regional de la Comunidad de Castilla-La Mancha comentó, en unas declaraciones recientes, que en Levante «llevan meses pidiendo agua para riego de socorro, agua a espuertas para regar los limoneros y los naranjos, y hoy son millones de kilos de naranjas y limones los que están sin recoger y pudriéndose. Es insostenible e inaceptable una situación así».

No vivo de los cítricos, pero ante la grave crisis de precios que está sufriendo el sector, las palabras del vicepresidente manchego muestran un grave desconocimiento del tema. ¿Qué se puede pensar de un alto cargo que parece mofarse de la grave situación que sufren sus conciudadanos? Entre las cosas más duras que soporta un agricultor está la de no ver reconocido su esfuerzo; piensen en el desprecio que representa para él que se diga alegremente que sus productos se pudren en el campo.

Xus D. Madrid. Palamós (Girona).

Lo de Alcorcón tiene que servir de aviso

Sr. Director:

Esta vez ha sido en Alcorcón, pero mañana puede que sea en cualquier otro lugar de España. La reyerta entre bandas que causó importantes daños y varios heridos este fin de semana es fruto del creciente odio racial que se empieza a sufrir en nuestro país.

O las autoridades se toman en serio cómo afrontar la llegada de tantos inmigrantes, y en tan poco tiempo, o pronto habrá sucesos como los de Alcorcón en todo el país cada fin de semana.

Lucas González. Burgos.

Fe de errores

La información publicada el 22 de enero sobre la Unión Europea y las sanciones contra Irán y Corea del Norte, titulada 'Gibraltar, escollo para las sanciones de la UE a Irán', debería haber ido acompañada del subtítulo: 'España bloquearía las medidas', en lugar de 'España bloquea las medidas', como apareció.

cartas.director@elmundo.es