Según confirmaron fuentes policiales, el accidente tuvo lugar sobre las 14.30 horas cuando Francesc S. N., de 76 años, se subió al techo de uralita de una nave de su propiedad contigua a su domicilio, según apuntan las primeras investigaciones con la intención de hacer unas fotografías, y el techo cedió. Al romperse la uralita, el anciano cayó de una altura aproximada de unos 8 metros y falleció tras impactar contra el suelo. Un trabajador que en aquellos momentos se encontraba en el interior de la nave oyó un ruido extraño, fue a ver qué había sucedido y encontró el cuerpo del accidentado. A pesar de que el trabajador alertó inmediatamente al servicio de emergencias, los médicos no pudieron hacer nada para salvar a la víctima.

Posteriormente se desplazó hasta el lugar la comitiva judicial, y el juez de guardia ordenó el levantamiento del cadáver. El cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico Forense donde se le deberá realizar la autopsia.