Miércoles, 24 de enero de 2007. Año: XVIII. Numero: 6247.
ÚLTIMAS NOTICIAS TU CORREO SUPLEMENTOS SERVICIOS MULTIMEDIA CHARLAS TIENDA LOTERÍAS
Primera
Opinión
España
Mundo
Ciencia
Economía
Motor
Deportes
Cultura
Comunicación
Última
Índice del día
Búsqueda
 Edición local 
M2
Catalunya
Baleares
 Servicios 
Traductor
Televisión
Resumen
 de prensa
Hemeroteca
Titulares
 por correo
 Suplementos
Magazine
Crónica
El Cultural
Su Vivienda
Nueva Economía
Motor
Viajes
Salud
Aula
Ariadna
Metrópoli
 Ayuda 
Mapa del sitio
Preguntas
 frecuentes
Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, hazlo tú (Gabriela Mistral)
 MADRID
Música
Hanna, espíritu de combate y 'flow' desde Ciudad Pegaso
La cantante, apadrinada por Bigas Luna en la banda sonora de 'Yo soy la Juani', anticipa esta noche en concierto los temas de su álbum de debut
JOSE MARIA ROBLES

eluche en llamas o regalo atado con alambre de espino, Hanna es, a tenor de lo que circula por los foros de internet en relación a su música, la próxima ama del rap, la nueva chula del barrio, directa pero suave, canalla de boquilla y, al final, esponjosa de espíritu (Que yo no soy mala/ pero a veces me lo tengo yo que hacer/ para que nadie por la espalda me la dé, se confiesa en el tema Revolución).

Publicidad
Caso insólito el suyo: no ha publicado aún su álbum de debut -Pura Hanna sale a la venta el 5 de marzo- y ya ha conseguido, politonos y Youtube mediante, que la bola de nieve eche a rodar. Y todo gracias a un grupo de incondicionales procedente de su barriada, Ciudad Pegaso, a su reciente actuación en el programa Sorpresa, sorpresa y, sobre todo, a la canción que Bigas Luna le tomó prestada para su película Yo soy la Juani: una balada a pelo titulada Como un mar eterno.

«Me parezco a ella en su capacidad de lucha, en tener las ideas claras para dejar lo que más quiere porque le hace daño y le impide encontrarse consigo misma», comenta en relación a aquella heroína de extrarradio una cantante que se presenta así, sin dobleces, con la determinación de sus 22 años y una visión de las cosas sin contaminar. Y es que en su ideario brinca una y otra vez esa idea de pugna, de ir a por lo que quiere con convicción. Una infancia como la suya, privada de algunos de los seres queridos más cercanos, marca. De ahí que se refiera a este disco como a «una revelación». «He debido sacar mucho coraje para llegar donde estoy», se confiesa ahora que inicia camino, al que ha puesto ritmo de hip hop, reggaeton, rumba, R&B y ecos orientales.

«Estos ritmos los llevo yo en el cuerpo, nadie me los ha impuesto. Tengo muchos estilos en mi cabeza y no todos los he volcado aquí. Se trata de un trabajo que se define en pocas palabras: de corazón y sin razón. Me sale de dentro y al mismo tiempo lo veo como una locura», explica Hanna, compositora autodidacta («ojalá hubiera tenido un profesor de piano o de canto») y próxima a las formas y maneras de La Mala, Bebe, Mónica Naranjo... Pero ella es reservada en lo de dar pistas: «Mis gustos van desde la música internacional hasta el flamenco más jondo. No me gustaría nombrar a nadie, aunque me gustan Santana y Gipsy Kings». Donde sí se muestra contundente es a la hora de valorar la progresiva incursión femenina en un tradicional territorio macho como el de las rimas urbanas. «El rap no es ni de hombres ni de mujeres. Es de sentimientos, de decir lo que se piensa sin prejuicios ni miedo».

Producido por el hiperubicuo Alejo Stivel, Pura Hanna ofrece borbotones de desesperación, de amor, de ansias de libertad (todo ello en, digamos, andaluz castizo), algunos tacos y alusiones a ciertas sustancias flipantes. La firmante pretende dejar claro que el vendible cliché de chica de la periferia no se ajusta necesariamente a su perfil. «He vivido en muchos barrios. El mío es entrañable». Por el contrario, prefiere hablar «de raza, de duende» y de «don». «No todo es rebelde o malo. Tengo cosillas escondidas que salen cada vez que me siento a componer».

Agrega Hanna, a quien el yoga ha ayudado a encontrar «serenidad», que no le cuesta encontrar la inspiración. «Lo hago con el corazón. Estoy un día sensible, voy por la calle y luego racatá, tres temas». Con la misma firmeza con la que da este primer paso, concluye: «Ahora veo exactamente lo que veía antes, sólo que cumplido. El corazón llega siempre más lejos que la razón. Luego están los juguetes rotos, pero de eso prefiero no hablar».

Hanna actúa hoy, a las 22.30 horas, en La Boca del Lobo (Echegaray, 11). Entrada libre.

recomendar el artículo
portada de los lectores
copia para imprimir
Información gratuita actualizada las 24 h.
 SUSCRIBASE A
Más información
Renovar/Ampliar
Estado suscripción
Suscríbase aquí
Suscripción en papel
 publicidad
  Participación
Debates
Charlas
Encuentros digitales
Correo
PUBLICIDAD HACEMOS ESTO... MAPA DEL SITIO PREGUNTAS FRECUENTES

elmundo.es como página de inicio
Cómo suscribirse gratis al canal | Añadir la barra lateral al netscape 6+ o mozilla
Otras publicaciones de Unidad Editorial: Yo dona | La Aventura de la Historia | Descubrir el Arte | Siete Leguas

© Mundinteractivos, S.A. / Política de privacidad