CUANDO: Anoche, en la sala Pachá

DONDE: Artistas consagrados apadrinaban a bandas que intentarán grabar con el sello

La industria musical va camino de cumplir una década contra las cuerdas. Los últimos síntomas de agotamiento: EMI despide a su directiva y V2 deja de editar novedades, viviendo a partir de ahora de su catálogo y despidiendo a artistas como White Stripes o Moby. Entre tanto, hay quien se resiste a la llegada del juicio final buscando fórmulas para que la música siga siendo un negocio rentable. Es el caso de SV, un sello virtual creado por la fusión de una discográfica, Sony BMG, y la compañía de telecomunicaciones Vodafone. De esta forma se adelantan a otros monstruos discográficos como Warner, que hace año y medio anunció la creación de una filial del estilo.

Anoche se presentó en sociedad el sello en la sala Pachá, a la vez que se dilucidaba el ganador de un concurso de maquetas de bandas noveles (que al final no lo fueron tanto). La ganadora, como premio, grabará un disco con SV.

Tocaban anoche cinco grupos en total. Como padrinos en la sala, que no en el escenario, artistas como Malú, Pereza, Haze o Pastora. El sarao, amenizado por una generosa barra libre, estaba hasta los topes. Abrieron la noche Statuas D Sal, de Ibiza. Deben tener muchos amigos en Madrid, porque la pista de baile fue un clamor cuando aparecieron. Tocaron dos temas, como el resto de bandas, con un regusto a Héroes del Silencio. Mientras los canapés volaban de las bandejas, el segundo grupo finalista, Universo Acelerado, abría su turno. Su pop sesentero y su vestimenta mod fueron sus armas para aspirar a la victoria final.

A continuación, el tercer finalista, el grupo Sueños de María, cuyo parecido a El Sueño de Morfeo no se ceñía únicamente al nombre. Siguieron otras dos bandas, también participantes en el concurso de maquetas, pero fuera de los finalistas. Si ya estaba sorprendiendo la edad de los participantes -nada de adolescentes, casi treintañeros-, cuando actuaron los Hobbies, la velada parecía más un concierto de viejas glorias que otra cosa. Sobre todo cuando descubrimos a Guzmán y Rodrigo en sus filas, de la mítica banda de los 70 Cánovas, Adolfo, Rodrigo y Guzmán.