ELENA ALJARILLA. Especial para EL MUNDO
BRUSELAS.-
Mozart, la iguana más famosa de Amberes, deberá despedirse de su flauta mágica. Tras casi un semana con una erección permanente, sus cuidadores y veterinarios han decidido amputar el pene que ya muestra signos de infección, y un primer tejido de necrosis. Afortunadamente para las iguanas, los machos de esta especie tienen dos penes que funcionan de manera independiente, así que Mozart recuperará su ritmo sexual y reproductivo con su segundo apéndice, en menos de una semana.
Mientras Bianca, Pepina, Trust y Joni esperan nerviosas y malhumoradas el retorno de su macho, Mozart sigue recluido en la soledad de su cuarentena, sobre una toalla mojada, intentando que le baje la erección. El reptil está tranquilo, nos dicen, y no sufre, pero «hay que hacer algo o el pene se le infectará y podría morir».
Si todo va bien, la operación se realizará hoy o mañana y tras varios días más en cuarentena, Mozart podrá regresar a su hábitat y satisfacer a sus cuatro chicas con su segundo pene.
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