MARISA RECUERO
MADRID.-
El mobiliario de Afinsa está de oferta. Los administradores concursales de esta empresa de inversión en bienes tangibles, inmersa en un procedimeinto concursal (antigua suspensión de pagos), están dispuestos a todo con tal de conseguir dinero para pagar las deudas contraídas con los acreedores.
Por ello, han solicitado al juez competente que les autorice a cerrar 87 delegaciones que la empresa tiene repartidas por España y vender el mobiliario y el resto de enseres. Y es que, según el escrito aportado al juez por los administradores, al que ha tenido acceso EL MUNDO, «ante la situación de ociosidad actual en la que se encuentran determinados recursos, materiales y humanos», la administración concursal ha considerado «necesario» un proceso de «reorganización» de la empresa.
Los administradores quieren poner en alquiler los locales, así como proceder a la venta de los muebles, pero con condiciones. No están dispuestos a realizar operaciones de traslado, desmontaje y almacenamiento del mobiliario en cuestión, ya que podrían resultar «más onerosas que su propio valor de liquidación». Con el dinero obtenido, prevén pagar las deudas que la empresa tenía contraídas con los arrendadores de dichos locales, además de atender al resto de acreedores. Los administradores justifican que la situación de la empresa es de «carencia de actividad y de empleados», por lo que «carece de sentido mantener la red de oficinas».
El estudio legal Osorio y Asociados, en representación de tres menores afectados por la presunta estafa cometida por la empresa sobre cerca de 190.000 clientes, presentó ayer una querella criminal en la Audiencia Nacional contra el ex director financiero de Afinsa, Rafael Noguero Galilea, por presunto delito de estafa contra la Hacienda Pública y falsedad en documento privado.
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