Ayer, se extendió a Andalucía y Baleares, y eran nueve las comunidades que permanecían en alerta. Asturias quedó casi incomunicada -3.500 vecinos de 52 núcleos rurales del Principado se quedaron aislados- y más de 26.000 niños no pudieron acudir de nuevo a clase. Pueblos aislados, viajes en tren cancelados, decenas de puertos cortados y problemas de tráfico y de luz fueron algunas de las incidencias que provocó el temporal.

Hoy, persistirán las temperaturas muy bajas en todo el país y habrá precipitaciones en el norte al nivel del mar, de 300 a 500 metros en el sur y a 700 metros en Baleares, según las previsiones del Instituto Nacional de Meteorología (INM).

Las inclemencias meteorológicas también afectaron al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que tuvo que suspender su visita a León a causa de las fuertes nevadas caídas en esta provincia.

Los copos también llegaron al sur peninsular. Córdoba se despertó ayer con nieve, por segundo año consecutivo y después de 35 sin hacerlo, aunque en la capital no llegó a cuajar. Las nevadas fueron intensas, sobre todo, en el norte de la provincia, lo que obligó, incluso, a cortar un tramo de la carretera.

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias incluyó ayer a Andalucía y Baleares entre las nueve comunidades autónomas en alerta por la posibilidad de que caigan copiosas nevadas en cotas bajas; las otras son Asturias, País Vasco, Cantabria, Aragón, Cataluña, Castilla y León y Castilla-La Mancha.

Las temperaturas podrían hoy registrar un descenso de ligero a moderado en el sur del país, mientras que en el resto permanecerán sin cambios. A partir del domingo se suavizarán, las nevadas se retirarán y sólo habrá lluvias.

Ayer, un total de 52 puertos de montaña permanecían cerrados, y en otros 51 era obligatorio el uso de cadenas a causa de la nieve. La situación mejoró, sin embargo, en la autopista de peaje AP-66, entre Asturias y León, donde el tráfico pudo reabrirse después de nueve horas cerrado a causa de la nieve, que también provocó la cancelación de vuelos y trayectos ferroviarios, dejando a la comunidad asturiana prácticamente aislada de la meseta.

En Granada, la Guardia Civil de Caniles rescató a dos jóvenes que habían quedado atascados en su vehículo cuando se adentraban en la Sierra de Baza, y en Cataluña, se activó el plan de emergencia y se movilizaron 250 personas y 45 máquinas quitanieves.

Los aeropuertos con mayores problemas fueron los de San Sebastián y Bilbao; cuatro salidas fueron canceladas a primera hora en el aeropuerto de León, y un avión procedente de Madrid con destino a la capital donostiarra aterrizó en Bilbao.

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