BARCELONA.-
El temporal de nieve que ha pintado España de blanco pasó ayer de puntillas por Cataluña, que se tuvo que conformar con las escasas precipitaciones que cayeron, que no servirán para acabar con la sequía que sufre la comunidad.
A las 18.00 horas de ayer no era necesario el uso de cadenas por presencia de hielo o nieve en ningún tramo o puerto de la red de carreteras catalanas, que se encontraba en funcionamiento en su totalidad, según informó a Efe el Servicio Catalán de Tráfico.
Fuentes de Bomberos de la Generalitat explicaron, por su parte, que a lo largo de la jornada de ayer tampoco tuvieron que realizar ningún servicio de urgencia relacionado con el temporal.
A pesar de la normalidad con la que se desarrolló el día, la dirección general de Emergencias y Seguridad Civil mantuvo la alerta del plan Neucat en 24 comarcas catalanas, mayoritariamente en las de Tarragona y Lleida, donde, según las previsiones meteorológicas, podrían acumularse grosores de nieve superiores a los dos centímetros a partir de cotas superiores a los 300 metros, con posibilidad de alcanzar los 10.
Las precipitaciones de nieve más importantes se produjeron a primera hora de la mañana de ayer en la comarcas leridanas, lo que obligó a suspender el servicio de transporte escolar en una ruta del Pallars Jussà y otra de la Segarra, según informó el departamento de Educación de la Generalitat.
La ruta suspendida en el Pallars Jussà afectó a 14 alumnos, mientras que la de transporte especial a Lleida, en la comarca de la Segarra, impidió ir a clase a seis alumnos.
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