En 2006 se crearon 687.000 nuevos empleos y la economía española logró un récord histórico. El número de ocupados superó por primera vez los 20 millones de personas.

Estos buenos datos se han producido a pesar de que entre octubre y diciembre de 2006, el volumen de desempleados aumentó en 45.600 personas, el 2,58% respecto al tercer trimestre de 2006, mientras que se crearon 106.200 puestos de trabajo, un 0,53% más. De hecho, la tasa de paro subió 15 centésimas en los últimos tres meses, debido, fundamentalmente, al aumento del paro entre las mujeres (42.100 paradas más que en el trimestre anterior).

En el conjunto de 2006 se crearon 687.600 empleos, situándose la tasa de crecimiento interanual en el 3,56% y el total de ocupados en 20.001.800, lo que supone un máximo histórico.

Los nuevos puestos de trabajo que emplearon a españoles crecieron en 277.000 (1,6%), en tanto que los correspondientes a los extranjeros lo hicieron en 410.600, casi un 19% más. Esto supone que seis de cada diez nuevos empleos creados durante 2006 en España fueron ocupados por extranjeros.

El número de personas activas aumentó en 656.900 personas, el 3,1%, con lo que la población activa quedó constituida por 21.812.400 personas y su tasa se aceleró casi nueve décimas, hasta el 58,58% de la población. En el cuarto trimestre de 2006, el volumen de activos creció en 151.700 personas, el 0,7% en relación al trimestre precedente.

Ayer, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, valoró positivamente los datos y auguró que en 2007 la tasa de paro «caerá por debajo del 8%» e, incluso, se situará «cerca del 7%», un dato «extraordinario», dijo, para un país que llegó a contar con más de 3,7 millones de parados (una tasa del 22,8%) en el primer trimestre del año1996.

Fuentes del Gobierno destacaron ayer que, por primera vez, se han superado los 20 millones de ocupados y señalaron a Europa Press que la caída del paro y la fuerte creación de empleo «vienen a confirmar el dinamismo del mercado de trabajo español».

Durante el pasado año, el desempleo aumentó entre las mujeres y descendió entre los hombres. De esta forma, el paro femenino creció en 26.800 personas (2,6%), mientras que el masculino se redujo en 57.400 personas (-7%). Con estos datos, la tasa de paro masculina se situó en el 6,06% y la femenina en el 11,36%, con caídas de seis y dos décimas, respectivamente.

Desagregando los datos por nacionalidades, el paro de los españoles bajó en 2006 en 136.300 personas (-8,57%), en tanto que los extranjeros en situación de desempleo aumentaron en 105.700 personas (42,33%). La tasa de paro de los españoles se situó en el 7,72%, cuatro puntos menos que la de los extranjeros (12,02%).

Por sectores, el desempleo se redujo el pasado año en casi todos ellos, a excepción de la construcción y los servicios, donde se incrementó en 4.300 y 46.200 personas, respectivamente, con aumentos porcentuales del 2,8% y del 7%.

En cuanto a los descensos, el mayor lo registraron los parados de larga duración, donde el desempleo se redujo en 34.100 personas (-6,1%), seguido del colectivo de los que buscan su primer empleo (18.500 parados menos), la agricultura (-17.800) y, por último, la industria (-10.800).

Pese al repunte del desempleo femenino, el incremento de la ocupación afectó en mayor medida a las mujeres que a los hombres. Así, las primeras concentraron 405.800 puestos de trabajo de los más de 687.000 empleos que se crearon en 2006, con un crecimiento del 5,2%. Por su parte, los varones ocuparon 281.700 empleos, con un incremento porcentual del 2,44%.

También el aumentó de la actividad se dejó sentir más entre las mujeres. Al finalizar 2006, un total de 224.300 hombres más querían trabajar (1,81%), con lo que la tasa de actividad masculina se situó en el 69%. Entre las mujeres, la actividad creció en 432.600 personas durante el pasado ejercicio, un 4,9% más, hasta situarse su tasa, todavía, en el 48,56%.

Por su parte, el número de activos extranjeros aumentó en 2006 en 516.300 personas. Una cifra mayor que entre los españoles, donde el incremento fue de 140.600 personas. De esta forma, la tasa de actividad de los extranjeros (77,6%) supera a la de los españoles (56,4%) en más de 21 puntos.

La creación de empleo en 2006 afectó a casi todos los sectores, excepto a la agricultura, donde se destruyeron un total de 84.900 empleos (-8,4%). La mayor parte de los puestos de trabajo generados el año pasado se concentraron en el sector servicios, que absorbió 540.900 nuevos empleos (4,3%). A mucha distancia, le siguió la construcción, que ganó 200.300 ocupados (8,2%), y la industria, que dio empleo a 31.300 personas más (0,95%), confirmando su recuperación.

Durante el pasado año, el número de asalariados creció en 624.500 personas (3,94%), hasta sumar 16.466.200. Los trabajadores con contrato indefinido crecieron casi el doble que los temporales, posiblemente, por las nuevas medidas incluidas en la reforma laboral a favor de la contratación fija. La tasa de temporalidad descendió ocho décimas y cerró el año en el 33,82%.