MADRID.-
El director general de la Guardia Civil ha decidido suspender durante tres meses, de forma cautelar, al secretario general de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), Joan Miquel Perpinyà, y a su secretario de Comunicación, Juan Antonio Delgado, como consecuencia de la concentración que la AUGC convocó en Madrid el pasado sábado y a la que parte de los asistentes, los dos sancionados y el resto de la Junta Directiva de la asociación, acudieron de uniforme.
Perpinyà y Delgado recibieron ayer en sus respectivas comandancias la comunicación de que a ambos se les ha abierto un expediente por falta muy grave, consistente en «observar conductas contrarias a la disciplina, servicio o dignidad del Instituto Armado, sin que constituyan delito», lo que supone apartarles del servicio durante 90 días, según informa Europa Press.
La AUGC celebrará hoy una asamblea general extraordinaria en Madrid, tras la cual realizará una comparecencia ante los medios de comunicación.
El Grupo Parlamentario Popular ha registrado una petición en el Congreso para que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, comparezca para explicar la situación de la Guardia Civil, después de la manifestación de agentes uniformados del pasado sábado. El propio Rubalcaba ha solicitado presentarse en la Comisión correspondiente para informar de las reformas legislativas que afectan al Instituto Armado.
Ayer, el secretario de Comunicación del PP, Gabriel Elorriaga, afirmó que se «ha creado un problema gravísimo» en la Guardia Civil, y que no parece que el Gobierno «esté siendo capaz de reconducir la situación».
Elorriaga consideró que este problema se ha producido por el «comportamiento irresponsable del PSOE», cuyo programa electoral despertó unas expectativas en el Cuerpo «que se han visto completamente defraudadas».
La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró ayer que no hay motivos para tener ninguna inquietud». Al término del Consejo de Ministros, dijo que «el Gobierno está cumpliendo sus compromisos, tanto en la mejora del sistema retributivo como de su estatuto personal».
LO QUE DICE EL RÉGIMEN DISCIPLINARIO
Son faltas leves:
«Hacer peticiones o reclamaciones en forma o términos irrespetuosos o prescindiendo del conducto reglamentario». «Acudir de uniforme a lugares [...] incompatibles con la condición de guardia civil [...]».
Son faltas graves: «Infringir gravemente su deber de neutralidad política, realizando actos irrespetuosos o emitiendo públicamente expresiones contrarias al ordenamiento constitucional [...], o a autoridades del Estado [...], cuando no constituya delito». «Hacer reclamaciones [...] contrarias a la disciplina o basadas en aseveraciones falsas, o formularlas con carácter colectivo».
Son faltas muy graves: «Observar conductas gravemente contrarias a la disciplina, [...] o dignidad de la Institución [...].
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