La ley debe ser como la muerte, que no exceptúa a nadie (Montesquieu)
CRONICA
LA VENTANA
EL FESTIN DE LOS NAUFRAGIOS
ANTONIO LUCAS
Los naufragios tienen algo de trágico festín. A éstos les sigue siempre el chispazo del saqueo. Es el vudú del robo sin maderos a la vista. Algo así pasó cuando el Napoli encalló la otra tarde en el Canal de la Mancha y se le desprendieron unos cuantos contenedores llenos, lenta piñata inesperada. El personal se lanzó al dulce mamoneo de llevarse lo que salía del mar por cortesía de un buque ya tísico y en mitad de las olas. Pronto surgió una barahúnda de nautas en vaqueros, de piratas colectando hasta la triste pluma del loro. Por ahí han salido motos de mucha cilindrada, bidones de whisky de malta y la aguja de oro que un diseñador regaló a un marinerito. Así es el salado hipercor del océano.