Según informaron desde la Guardia Civil, efectivos de Emergencias Sanitarias del 061 de la localidad granadina de Baza lograron rescatar al individuo poco antes de las 18.00 horas, y trasladarlo en una UVI móvil al hospital comarcal bastetano, aunque no precisaron acerca de su estado de salud.

El acceso a la zona, que permaneció todo el día incomunicada por el corte al tráfico de la variante norte de la A-92 debido a una capa de nieve de más de un metro de espesor, se realizó, finalmente, a través de la carretera que une Chirivel con el municipio granadino. Resultó necesario el apoyo de una máquina quitanieves.

Durante todo ese tiempo, el herido tuvo que ser atendido en el cuartel de la Guardia Civil de Chirivel por un médico del centro de salud. En las mismas instalaciones de la Benemérita permanecían otros cinco heridos leves por el derrumbe del techo de la estación de servicio que se produjo debido a la acumulación de la nieve que, en algunos puntos de la comarca, llegó a alcanzar 1,5 metros de espesor.

El desplome se produjo pasadas las 9.30 horas de ayer y, en un primer momento, fueron 15 las personas que sufrieron las consecuencias de la caída de la marquesina de la gasolinera que provocó daños en, al menos, siete vehículos. La mayoría de ellos presentaba heridas muy leves, por lo que pudieron abandonar, casi de inmediato, el improvisado centro de salud.

30.000 pueblos sin luz

Además del derrumbe en la estación de servicio de Chirivel, también se registraron otros, por similares causas, en varias casetas de aperos en Vélez-Rubio, sin provocar en esta ocasión daños personales. La totalidad de las comarcas de Los Vélez y del Almanzora vivieron ayer el segundo día del temporal de nieve que azota la provincia. Numerosos pueblos incomunicados y un total de ocho carreteras cortadas al tráfico es el balance de una jornada que, según las previsiones meteorológicas, tendrá continuidad hoy.

El temporal se cebó especialmente con el sureste peninsular. Un total de 30.000 viviendas (al cierre de esta edición eran ya sólo 11.000) de las provincias de Almería, Granada y Jaén llegaron a quedarse sin suministro eléctrico a primera hora de la tarde de ayer como consecuencia de los daños causados por el temporal de frío y nieve en las instalaciones de distribución, según datos de la compañía Sevillana Endesa.

El temporal de nieve derribó más de 50 torres de electricidad en las provincias de Almería y Granada, lo que supuso la interrupción del flujo eléctrico para decenas de miles de clientes.

Un portavoz de la compañía de abastecimiento energético informó a Europa Press de que los técnicos y operarios de la empresa fueron solucionando progresivamente buena parte de los problemas surgidos a lo largo del día. Dado el avance de las brigadas desplazadas, la empresa confía en ir solventando poco a poco tales problemas.

Los principales incidentes afectan aún al norte de la provincia de Almería, con 6.000 clientes afectados fundamentalmente en la Sierra de María, Chirivel, Oria y Vélez Blanco. En esta provincia, el peso de la nieve derribó una treintena de torres de electricidad.

El corte de carreteras principales, como la A-92 y muchas comarcales, dificultaba el trabajo de las brigadas técnicas de Sevillana Endesa que, desde que se activara la alerta por fuertes nevadas en esta zona del territorio, se encuentran operativas con todos sus efectivos. En cualquier caso, se está intentando desplazar grupos electrógenos hasta los lugares no accesibles a consecuencia de la meteorología.

Respecto a Jaén, la zona que se ve afectada en el momento de redactar esta información (2.400 clientes aproximadamente) se centra en los alrededores de Huésar y Quesada, donde árboles y cables de las líneas eléctricas se vinieron abajo.

En Granada, las localidades afectadas se encuentran en el entorno de la zona de Castril y San Clemente, con 3.000 clientes afectados. En esta provincia cayeron una veintena de apoyos (torres) eléctricos, cables aéreos y árboles sobre las líneas.