Desde el punto de vista de la población, siguiendo los datos de la Comunidad de Madrid en el último sondeo, en 2005, Móstoles se sitúa a la cabeza de la lista con 204.463 habitantes. Le siguen Alcalá de Henares -197.804- y Fuenlabrada -195.131-. Después vienen Leganés, Alcorcón, Getafe, Torrejón de Ardoz, Alcobendas, Parla, Coslada, Pozuelo de Alarcón, Las Rozas, San Sebastián de los Reyes, Collado Villalba y Aranjuez. Éstos son los 15 municipios con mayor población de la Comunidad. Sin embargo, el orden cambia si se habla de pronósticos.

Las previsiones de población de toda la región para 2017 son de 6.726.480 habitantes. En 10 años, Móstoles mantendrá el liderazgo, pero Alcorcón y Alcalá de Henares se situarán empatados en el segundo puesto y Fuenlabrada bajará hasta ser la quinta de la lista, incluso Getafe le adelantará.

Los planes generales de estos municipios prevén muchos cambios, pero ninguno, dicen desde sus ayuntamientos, aspira a albergar más población y viviendas de las que puede absorber. Así, Alcobendas espera tener una población de 135.000 habitantes para el año 2013. Para estos nuevos residentes, el Ayuntamiento construirá alrededor de 14.000 viviendas, el 70% de ellas de protección oficial. El alcalde del municipio, José Caballero, indica que el crecimiento de Alcobendas es «uno de los más ordenados». Su plan lleva vigente desde 1994, por lo que ahora se encuentra en revisión. Su principal demanda para el nuevo PGOU es la «necesidad y obligación de exigir el cierre de la M-50».

Caballero se enorgullece de que no sea sólo la población la que aumente, sino que también «mejora» el empleo, las zonas verdes y deportivas, el suelo urbanizable... Para Alcobendas, dice, el Plan General es una «necesidad», no una «cuestión ladrillera».

Móstoles prevé hasta 284.000 habitantes en los próximos años, 40.000 más de los esperados, para los que se construirán 31.000 domicilios. El 51% de éstos será de carácter protegido. Sin embargo, el nuevo PGOU no incluye únicamente viviendas, también «casi seis millones de metros cuadrados de zonas verdes». Este aumento supone que cada habitante pueda disfrutar individualmente de 23 metros cuadrados.

El concejal de Urbanismo, José María Castillo, asegura que «en sólo dos años -refiriéndose a finales de 2005, cuando se aprobó el plan-, el PP ha logrado desbloquear un asunto que llevaba enquistado 20 años», ya que el último Plan General databa de 1985.

En Alcalá de Henares se han puesto como límite los 250.000 habitantes. Actualmente cuenta con cerca de 200.000, por lo que supondría un aumento del 20%. La frontera en las viviendas la cifran en las 20.000, 10.000 de ellas con algún tipo de protección.

Apuestan por proyectos de vida diferentes, por lo que construyen tipos de vivienda distintos: pisos en altura, viviendas adosadas y unifamiliares independientes. «Para que nadie tenga que dejar de vivir en Alcalá de Henares porque no encuentra lo que busca o necesita».

El Ayuntamiento de Coslada, al contrario que el de Móstoles, no sabe a ciencia cierta cuántos habitantes tendrá su municipio en un periodo de 10 ó 15 años, pero están convencidos de que superarán los 120.000 y de que muy probablemente alcancen los 125.000. Esto último supondría un ascenso de más del 33% de la población con respecto a 2005. Actualmente, el Consistorio está a la espera de que la Comunidad de Madrid apruebe la revisión de su plan de 1996, en el que se proyecta la construcción de 9.000 nuevas viviendas.

Las aspiraciones de Torrejón de Ardoz son ligeramente superiores. Su objetivo son los 130.000 habitantes. Debido a la calidad de «ciudad compleja», como el propio Ayuntamiento la define.

El objetivo a largo plazo de San Sebastián de los Reyes son los 100.000 habitantes, su «horizonte máximo», pero por el momento se conforman con llegar a los 80.000 en un plazo de 5 ó 10 años. Su concejal de Urbanismo, Rubén Olguera, cree que el PGOU es «totalmente necesario, por la necesidad de vivienda para jóvenes». Además, considera que esta necesidad viene generada por la misma capital, «que no puede absorber toda la población y traslada la presión a otros municipios de la periferia».

Del mismo modo, Las Rozas establece su límite en los 110.000 habitantes y las 7.556 viviendas. Alcorcón alcanzará los 250.000, Pozuelo de Alarcón, los 115.000, y Leganés los 200.000.

Las previsiones de Collado Villalba son mucho menores que las de los municipios anteriores. En 2005 contaba con 52.445 habitantes, pero espera llegar a los 83.500 en los próximos años. Sin embargo, sólo se han planteado la construcción de 665 nuevas viviendas, además de «nuevas dotaciones públicas, nuevas vías de circulación, aparcamientos y un intercambiador de transportes». Aranjuez, para entonces, también rondará los 80.000 habitantes.

La situación de Parla es totalmente distinta a las demás. Su Plan General ha sido aprobado por todos los vecinos. En el Foro Ciudadano del municipio participaron 250 personas, las que estipularon que el techo poblacional fuera de 150.000 habitantes en las próximas décadas. También acordaron un 80% de vivienda protegida y ayudas en los alquileres, de modo que no sobrepasen los 200 euros.