A la sombra del Atomium, el monumento belga símbolo del progreso en los años 50, Microsoft lanzó ayer el programa que promete innovar su ya vieja compañía y que llega con una enorme operación de marketing en todo el mundo, con shows desde Nueva York hasta Seúl. Pero Vista, el resultado de cinco años de trabajo, ya se enfrenta a las quejas de monopolio de la Comisión Europea y a un mercado no tan fácil de dominar, como reconoce su director de ventas en Europa, Oriente Medio y Africa, Michael Hartmann.
Pregunta.- El nacimiento del sistema operativo Windows 95 llegó con el boom de internet, pero, ¿no es mucho más difícil ahora sin ninguna revolución?
Respuesta.- También hay muchas tendencias nuevas reflejadas en Vista. La banda ancha ha determinado parte del trabajo. En Europa, el 40% de las casas la tendrán antes de 2010, y esto empuja a la gente a utilizar sus ordenadores de manera diferente. Las nuevas preocupaciones son los ataques o los virus a través de la conexión, así que hemos prestado mucha atención a esto. También ha habido mucho progreso en otras áreas, por ejemplo el entretenimiento digital. Hace diez años, poca gente utilizaba cámaras digitales; ahora hay tantas como ordenadores. Hemos creado más funciones para que sea más fácil descargar, editar, mandar o imprimir fotos.
P.- Dentro de los nuevos hábitos, también está la descarga de software gratis, ¿no teme por su negocio?
R.- Ya somos una de las grandes compañías en el negocio del software gratuito, como las actualizaciones del Explorer o el Instant Messenger, y hay un mercado enorme en el comercial, no sólo del sistema operativo, sino de todo tipo de productos, por ejemplo videojuegos. Hay un gran mercado en la combinación de software, servicios y componentes on line.
P.- ¿Y la competencia de Google? Ellos sí que parecen la nueva vía...
R.- Nos están haciendo la competencia en muchos niveles, en la publicidad, los buscadores, los servicios a empresas o los buscadores de escritorio. Nosotros intentamos hacer productos mejores, y en realidad nuestra mayor competencia ahora son las viejas versiones de Windows. El reto es convencer a la gente de que actualice XP y se pase al nuevo sistema.
P.- Pero obligan al usuario a comprarse otro ordenador, donde funcione Vista.
R.- Es posible que funcione en uno de hace diez años. Pero hay ordenadores en el mercado de hace cinco o seis años cuyo hardware nunca estuvo diseñado para Vista. Los consumidores entenderán las ventajas de nuestro nuevo producto, si quieren innovación y más capacidad.
P.- ¿Están los retrasos de lanzamiento relacionados con el intento de cumplir las demandas de la Comisión Europea en sus denuncias anti-monopolio?
R.- No, el cambio de planes lo anunciamos después. Con la Comisión hemos tenido un diálogo muy productivo. Hemos llegado a un acuerdo para hacer cambios en seguridad, búsqueda y formatos.
P.- Pero la Comisión insiste en que aún no le han dado toda la información exigida y ha habido otra denuncia contra Vista de sus rivales.
R.- No es nueva, pero el viernes sacaron un comunicado de prensa para reforzar las quejas ya presentadas. Esperamos respetar las demandas. Nuestro objetivo es el diálogo con la Comisión, nuestro principal interlocutor.
P.- ¿Su compañía no se siente perseguida tras años de batalla?
R.- Es un proceso. Estamos contentos de ver el progreso que hemos hecho con la Comisión en los últimos meses y años. Creemos que ahora tenemos un diálogo más eficaz y más orientado al resultado final.
