Como envueltos en una burbuja de modernidad incontrolable: dos plantas, una vista a la calle, la otra refugiada en un atractivo patio, mesas, sillas, decoración... que parecen recién llegados del incomprendido Plutón. Una escenografía virtual para sumergirse en una carta ¿también virtual? Se anuncia como cocina fusión américa-asia... Eso se traduce en cocina al wok de carne y verdura, en salsa de coco y de otros nombres impronunciables, en pollos rebozados en sésamo, en hamburguesas de carne de costilla con algún que otro guiño del recetario asiático... Pero la fusión a veces lleva a la confusión. ¿Por qué le llaman de una manera a un simple ketchup y te hacen creer que es salsa de mango? Quizá, sinceramente, tendría que revisar, y bastante, la cocina, por lo demás (ambiente, sitio, precio...) muy en la línea de esos locales fashion que abren en Madrid y que tienen su público, aquel que gusta de ambiente juvenil y ultramoderno.