C. R. G.
MADRID.-
El PP ha visto en el «desastre medioambiental» del buque Sierra Nava la reedición del Prestige y la oportunidad de devolver al PSOE todas las acusaciones a las que hubo de enfrentarse el Gobierno del PP en 2002.
El PP no sólo decidió ayer pedir la comparecencia en el Congreso de las ministras de Fomento y de Medio Ambiente, sino que acusó a éstas de no asumir su responsabilidad, y al presidente, Rodríguez Zapatero, de «falso ecologismo».
«Se coloca la pegatina del Nunca Mais cuando gobierna el PP y se la quita cuando gobierna él», denunció ayer Angel Acebes, quien también repartió estopa contra el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, por «no haber admitido voluntarios para recoger el chapapote, cuando antes fletaba autobuses».
Los populares daban así una vuelta de tuerca política a la crisis del vertido en las costas de Algeciras. La semana pasada, el presidente del PP regional, Javier Arenas, aseguró que su partido no haría campañas contra el Gobierno andaluz como éste hizo en su día contra Aznar, siempre que se dieran las oportunas explicaciones sobre lo ocurrido. A falta de éstas, el PP nacional entró ayer a saco sobre el asunto y acusó al Ejecutivo central de «imprevisión» y de «intentar minimizar el suceso en lugar de solucionarlo».
Por su parte, la Junta de Andalucía informó de que el 80% de la playa de El Chinarral, afectada por el vertido, está «limpia», tras recoger un total de 2.151,52 toneladas de residuos. La empresa Auxiliar Marítima indicó que se han vaciado todos los tanques de proa del buque, que contenían gasoil, y que se ha comenzado a bombear el fuel. Además, informó de que se ha limpiado la cubierta y vaciado el buque de provisiones y basura.
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