Almenara, que mostró sus satisfacción por la decisión de la Generalitat de abrir un expediente por estos hechos, afirmó que esta información «es muy grave», por lo que añadió que han remitido la edición de EL MUNDO de ayer a los miembros de la Junta del Colegio de Psicólogos de Barcelona para que analicen la situación.

Según el decano, «el Colegio tomará una decisión» respecto a la denuncia de los facultativos en los próximos días. No obstante, Jaume Almenara recordó que «el Colegio tiene que hablar de lo que sabe», aunque añadió que desde la institución que dirige están «abiertos» a recibir las denuncias de estos psicólogos que han recibido presiones de los centros médicos a los que están adscritos para que certifiquen como «aptos» a los solicitantes de permisos de armas.

El decano del Colegio de Psicólogos de Barcelona quiso dejar «claro» que cuando las Fuerzas y Cuerpos del Estado o los Mossos d'Esquadra les han solicitado su colaboración para «algún asunto» siempre se han mostrado «dispuestos a ello».

«He hablado con la Junta del Colegio y en los próximos días tomaremos una decisión respecto a esta polémica», concluyó Jaume Almerana.