La Asociación Profesional de la Magistratura (APM) advirtió que la dimisión del juez sería «fraudulenta» mientras que Jueces para la Democracia resaltó que se trata de una decisión personal que debe tomar con «libertad», según informa Europa Press.

El portavoz de la APM, Antonio García, indicó que ni siquiera se plantea la posibilidad de que el juez del Alto Tribunal dimita y advirtió que, en caso de que lo hiciera, incurriría en una «actuación fraudulenta» que podría tener consecuencias jurídicas.

García añadió que «ningún magistrado y menos del Tribunal Constitucional» puede presentar su dimisión en las actuales circunstancias y tras una decisión tomada siguiendo el procedimiento legal establecido.

El portavoz destacó, además, que su asociación no considera «pertinente» que en este caso, «como en todos los que tienen calado político», se establezca «una guerra de opinión sobre las tendencias políticas de los magistrados» y subrayó la necesidad de «respetar lo que se ha resuelto».

«Valoración política»

A este respecto, el portavoz de Jueces para la Democracia, Jaime Tapia, calificó de «razonable» la decisión y apuntó que la posible dimisión del juez del Constitucional debería hacerse «desde un ámbito de libertad y no por presiones políticas».

Tapia indicó que existían «fundamentos para apoyar tanto esta decisión como la contraria» y advirtió de que las valoraciones de calado político hacen «un flaco favor a la administración de Justicia». «Hay que esperar que la decisión sobre el Estatut esté fundada en Derecho, en la Constitución, y no en ideologías políticas», expresó.

En la misma línea de respeto a las decisiones judiciales se mostró la Asociación de Jueces y Magistrados Francisco de Vitoria. Según su portavoz, Juan Pedro Quintana, la decisión del Alto Tribunal de estimar la recusación del PP debe ser «respetada» sean cuales sean las opiniones políticas que puedan existir al respecto.

En cuanto al posible abandono del juez catalán, Quintana indicó que se trata, en todo caso, de «una decisión libre», aunque matizó que no considera que la recusación sea «razón suficiente» para presentar la dimisión.