MATADEPERA.-
El alcalde de Matadepera, Jordi Comas (ERC), considera «grotesca» la denuncia del grupo municipal del PP, que le acusa de prevaricación y ultraje a la bandera española por no colgar la enseña estatal en el balcón del edificio consistorial.
Comas prestó ayer declaración ante el titular del juzgado de instrucción número 2 de Terrassa tras la denuncia del grupo municipal del PP por no colgar en la fachada del Ayuntamiento la bandera española junto a las otras oficiales, la municipal, la europea y la catalana.
El Ayuntamiento de Matadepera sólo cuelga las banderas de los mástiles en ocasiones puntuales, como visitas de personalidades importantes o festividades señaladas, como la Fiesta Mayor.
En la celebración de 2005, el alcalde decidió no colgar la bandera española atendiendo a su propio criterio, sin que el equipo de Gobierno tuviera ninguna responsabilidad en la decisión, informa Efe.
Comas declaró antes de entrar en las dependencias del juzgado de Terrassa que «se trata de una responsabilidad mía, no del equipo de Gobierno, no ha habido un acuerdo de Gobierno ni un decreto de alcaldía». El alcalde de Matadepera añadió que «sólo se trata de una decisión espontánea para reflejar en el balcón del Ayuntamiento del municipio lo que es una política de símbolos».
Según Comas, «hay una serie de símbolos no compartidos por la mayoría de la población», como la bandera española. Comas afirmó que desde ERC «optamos por conservar aquellos símbolos oficiales que compartimos en las instituciones oficiales, y son los símbolos que podemos encontrar en cualquier acto político».
Comas se presentó en las dependencias judiciales acompañado de varios concejales y amigos para mostrarle su apoyo.
Entre los acompañantes figuraba el portavoz de ERC en el Parlament, Joan Ridao, quien manifestó su apoyo a Comas en nombre del partido y coincidió con el alcalde en tildar el episodio de «grotesco e hilarante». Según Ridao, «esto demuestra que ciertas instituciones y el poder judicial pueden actuar políticamente y hacerlo como correa de transmisión, y cómo algunos partidos políticos pueden usar la justicia en beneficio propio para erosionar la imagen y perjudicar a las instituciones».
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