Según un informe presentado ayer en Barcelona, el 45% de los catalanes de más de 65 años que viven en casa considera que su calidad de vida es «muy buena», mientras que sólo el 7% cree que es «muy mala». El resto, un 48%, califica su situación de «normal».

El estudio, realizado por la Fundación Viure i Conviure de Caixa Catalunya y el Institut Català de l'Envelliment, indica que las mujeres tienen una percepción más negativa en todos los ámbitos, ya sea en la salud, el estado de ánimo, las relaciones sociofamiliares y la capacidad económica, según Europa Press.

De este modo, aunque más de la mitad de los encuestados cree que su salud es buena o muy buena, es la mujer la que responde más negativamente. En términos generales, el 73% de los varones afirma que está sano, pero este porcentaje desciende al 64% en el caso de las mujeres. Es la salud uno de los indicadores más importantes del bienestar, y cada anciano padece de media 4,3 enfermedades, con cifras superiores para el género femenino.

El 40% tiene artrosis o reuma, hipertensión y cataratas o problemas de visión. Aproximadamente el 20% sufre problemas de corazón, próstata y audición. Por último, el 10% presenta cuadros de diabetes, problemas respiratorios o depresión.