La Generalitat quiere evitar la proliferación de guetos escolares en algunas zonas posibilitando la reducción de las ratios en todos los centros educativos, públicos y concertados, para hacer frente a la llegada de alumnos inmigrantes durante el curso, y realizando un reparto equitativo posterior.
Ésta es una de las novedades que recoge el borrador del decreto de admisión de alumnos, que establece las normas de preinscripción y matriculación de los alumnos el curso que viene.
El borrador establece la reserva general de dos plazas por grupo para los niños con necesidades educativas especiales, que en la mayoría de los casos ocupan inmigrantes recién llegados, medida que sólo se podrá utilizar durante el periodo de matrícula.
Además, Educació se plantea en algunas zonas donde se prevea una llegada importante de inmigrantes durante el curso aumentar esta reserva o reducir la ratio en todos los centros, tanto públicos como concertados, para poder realizar luego un reparto equitativo entre ellos de los nuevos alumnos. El secretario de Política Educativa, Francesc Colomé, explicó que estos mecanismos «mejoran» el proceso de admisión de alumnos y pretenden contribuir a evitar la «guetización» de algunos centros, que acaban escolarizando a la mayoría de inmigrantes.
Colomé subrayó que el reparto de inmigrantes entre los centros se hará «con el máximo consenso posible con la escuela concertada», reacios tradicionalmente a aceptar a estos alumnos por la pérdida económica que suponen.
El sindicato USTEC-STEs, mayoritario en la escuela pública, aseguró ayer que el decreto es «totalmente insuficiente» para caminar hacia la «equidad» en la escolarización de estudiantes entre los centros públicos y los concertados. Según el sindicato, el decreto «mantiene una línea de falsa neutralidad de la Administración en el proceso y permite que sea la patronal de la privada concertada quien regule el mercado en función de sus necesidades».
Por otra parte, los niños celíacos o con enfermedades crónicas podrán usar las plazas reservadas para necesidades especiales a la hora de elegir escuela, con lo que tendrán una vía diferenciada para matricularse, mientras que las familias numerosas perderán sus puntos extra y sólo tendrán ventaja en caso de empate.
Para el secretario de Políticas Educativas, el debate de las familias numerosas es «minoritario», porque ya prima «extraordinariamente» tener un hermano en el centro y, en el caso de las familias que matriculan por primera vez a su hijo, es difícil que sean ya numerosas.
La Asociación de Familias Numerosas de Cataluña (FANOC) criticó ayer el nuevo decreto del Departament d'Educació por considerar «una burla» la modificación de los criterios de admisión de los alumnos, que suprime las ventajas que tienen las familias numerosas.
La FANOC denuncia que los cambios que quiere introducir el departamento que dirige Ernest Maragall «no tienen prácticamente ninguna repercusión positiva para las familias numerosas».
Según la FANOC, «todos los agentes de la comunidad educativa» están de acuerdo en mantener los puntos actuales ya que, a su entender, «no se perjudica a nadie manteniéndolos y, en cambio, sí se hace al suprimirlos».