La conferencia municipal de Ciutadans se saldó ayer con un nuevo manifiesto del partido, mucho debate interno, muchas propuestas para las elecciones municipales que se celebrarán el próximo 27 de mayo y con la voluntad, expresada por el presidente de la formación, Albert Rivera, de que su partido supere algunos «complejos trasnochados» de la izquierda. Que no caiga en ellos en materia de seguridad ciudadana, por ejemplo, que propuso mantener a través de la «cohesión social» y del «civismo».
La medida está incluida en el nuevo manifiesto que presentó ayer Ciutadans, en el que se acusa a la «cohesión identitaria de los nacionalismos» de «debilitar» la convivencia. «Deseamos una policía para la seguridad y no para la identidad. Cumplir la ley y evitar las actitudes antisistema forma parte de la definición de ciudadano y son la garantía de que sus derechos de ciudadanía serán respetados», reza el texto.
Pero el manifiesto, que se pretende algo así como la hoja de ruta de las elecciones municipales, va más allá. Teniendo en cuenta la «buena acogida» del proyecto en toda España, recuerda que Ciutadans se constituyó como «partido de ámbito nacional español» y reclama su presencia junto a los dos grandes partidos, PSOE y PP. Porque, según ellos, «muchos ciudadanos perciben que la derecha española no está legitimada para liderar la vía al desarrollo de la libertad porque sigue anclada en sus privilegios caducos y actitudes prepotentes», y otros muchos se dan cuenta «desde hace tiempo de que la vieja izquierda tampoco está preparada para conducir el proceso de emancipación social porque carece de un proyecto real de emancipación colectiva de clase».
Rivera, que clausuró el encuentro tras llegar a Barcelona desde Andalucía, donde ha pasado el fin de semana con las agrupaciones de su partido en Málaga y Sevilla, se trajo buenas sensaciones para ese despegue en el resto de España. «Hay muchas expectativas a nivel nacional puestas en nuestro partido. El mensaje es esperanzador, creo que esto va a salir muy bien», aseguró el presidente de Ciutadans.
El manifiesto se basa en la vocación ciudadana -en referencia a los habitantes de las ciudades- del partido, algo que sirve para aventurar que será en ese tipo de urbes donde el partido centrará su campaña electoral. Pide hacerlas más humanas, sostenibles y seguras. A ello se añadieron algunas propuestas surgidas de los debates, a menudo enconados, de ayer, como la que anunció Rivera de proponer unas «mancomunidades de municipios» para «mejorar servicios como transporte público o sanidad», o la de usar el método de las «consultas populares» para asuntos que «puedan ser importantes para la estructura de los municipios, como los lindes o la política urbanística».
Tras el encuentro de ayer, la dirección del partido también prometió tener en cuenta otras propuestas, como la de usar un sistema de evaluación continua a los cargos públicos, la de luchas por las listas abiertas, la de favorecer la vivienda de alquiler «no expropiando, sino convirtiendo a la administración en el enlace entre la demanda social y la oferta» o la apuesta por las nuevas tecnologías, cuyo acceso universal garantiza hoy en día «la igualdad de oportunidades».
Para concluir, Rivera quiso lanzar otro mensaje de ánimo a los delegados de la formación. Les dijo que no tuvieran miedo a encabezar o a integrarse en alguna lista electoral para los comicios, porque el proyecto «está funcionando». «La simple actitud de otros partidos y de algunos medios de comunicación marca la importancia que estamos empezando a tener. Se está creando una gran corriente de simpatía hacia Ciutadans», afirmó el presidente de la formación.