La nueva versión de los hechos es el resultado de un peritaje realizado muy recientemente por una unidad especializada en búsqueda audiovisual de los Mossos d'Esquadra, a partir de las filmaciones obtenidas por las cámaras de seguridad que había instaladas en la finca de los Tous, en la urbanización de Pineda de Bages.

Según este peritaje, no se puede afirmar que los destellos de luz que aparecen en las grabaciones correspondan a los dos disparos que efectuó el yerno de los Tous con su arma reglamentaria. Una de las balas impactó en la cabeza del presunto asaltante, Sinani Gazmend.

Esta circunstancia introduce una duda sobre el tiempo que transcurrió entre el momento en que Corominas llegó al lugar donde estaba el vehículo en el que se hallaban los dos presuntos asaltantes, y el momento en el que disparó. Si transcurrieron varios segundos, en ese lapso de tiempo podrían haberse dado situaciones que avalasen la tesis de legítima defensa.

Hasta ahora, la reconstrucción de lo que pasó el 9 de diciembre se basaba en un atestado realizado por los Mossos que afirma que, un segundo después de que el yerno de los Tous se situase al lado del coche de los kosovares, se observa en la filmación «una fuente intensa de luz de color naranja», lo que «parece ser una detonación».